"No habrá ninguna disminución en la presión que estamos aplicando. Creo que (...) mientras sostengamos el curso en el que estamos, (Khadafi) renunciará", dijo Barack Obama durante una conferencia de prensa junto a David Cameron, previa a un encuentro que mantuvieron en la residencia del inglés donde agasajaron a civiles y militares de ambos países, sirviéndoles una barbacoa. "En última instancia -añadió-, este va a ser un proceso lento y continuo, en el que vamos a ser capaces de desgastar a las fuerzas del régimen".

Por otra parte, el norteamericano rechazó poner un plazo final a la participación de Estados Unidos en la campaña de ataques contra el gobierno de Khadafi que dirige la OTAN. Reiteró que su gobierno y el del Reino Unido no apoyarán una invasión militar terrestre en Libia. “Esto significa que a veces puede ser que tengamos que ser más pacientes que lo que querría la gente", señaló.

Cameron coincidió con Obama y dijo que se necesitan "paciencia y persistencia" para forzar la renuncia de Khadafi a fin de poner fin al conflicto de ya más de tres meses entre gobierno y rebeldes libios. A pesar del tiempo transcurrido, agregó, “estamos fuertemente unidos en querer ver el mismo resultado".

También, ambos líderes reafirmaron su determinación común pese a quejas de algunos países de la OTAN que quieren un rol más protagónico de Estados Unidos en la operación.