Luis D'Elía, Angel Borello y Luis Alberto Bordón volverán a ser procesados por la toma de la Comisaría 24, ocuurida en junio de 2004, tal como había dispuesto en octubre de 2009 el juez federal Sergio Torres, por los delitos de "coacción agravada, lesiones leves y daño agravado". Luego, la Cámara Federal redujo la calificación a "atentado y resistencia a la autoridad", un delito menor y con una pena de prisión baja, por lo que dio por prescripta la causa.

Los fiscales Luis Comparatore y Germán Moldes apelaron aquel fallo, al considerar que se debe investigar el delito más grave, lo que fue compartido por Casación. "Para establecer el término de la prescripción de la acción en un proceso penal ha de estarse a la pena del delito más severamente reprimido", coincidieron los jueces de la Sala III de Casación, Liliana Catucci, Eduardo Riggi y Raúl Madueño, quines agregaron que la Cámara Federal "al resolver como lo hizo, dejó de lado inexplicablemente acomodamientos de la conducta de los enjuiciados D'Elía, Bordón y Borello, a otros delitos cuya acción penal subsiste". Así, ordenaron la reapertura del caso y dispusieron que Torres "deberá imprimir a este proceso urgente trámite para dar inmediata definición a los procesamientos de los imputados".

La toma de la comisaría ocurrió en la madrugada del 26 de junio de 2004 cuando D'Elía y un grupo de manifestantes concurrieron a la seccional para reclamar por el asesinato del dirigente del Comedor "Los Pibes", Martín "Oso" Cisneros. El grupo liderado por D'Elía acusó a los policías de ser cómplices de la muerte de Cisneros e ingresó a la dependencia, donde produjo daños materiales y agredió a un agente.