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Estados Unidos pasó por encima a la Argentina por 105-78 y se clasificó para las semifinales del torneo olímpico de baloncesto de Rio-2016, donde enfrentará a España. Los estadounidenses se anotaron su sexta victoria en seis partidos en los Juegos de Rio, donde buscan su tercera de medalla de oro consecutiva.

El equipo argentino soñó instante con la gesta de Atenas 2004, cuando derrotó en semifinales al Dream Team antes de colgarse el oro en la final. Con un buen arranque, Argentina se adelantó en el marcador al inicio del encuentro, llegando a estar 19-9 arriba a cuatro minutos para el final del primer cuarto.

A partir de ahí, apareció Kevin Durant para iniciar la remontada estadounidense hasta dar la vuelta al marcador y acabar el cuarto 25-21 a favor de EEUU. Durant fue el mejor anotador del encuentro con 27 puntos.

Durant tomó las riendas del equipo, mientras bajo los aros, DeAndre Jordan ganaba su batalla con Scola y los rebotes acababan en manos estadounidenses (54). Punto a punto, Estados Unidos se fue al descanso 56-40 arriba, un marcador que no haría más que crecer a favor de los norteamericanos a la vuelta del entretiempo.

En los dos últimos cuartos, los argentinos trataron de resistir a la avalancha estadounidense alentados por la numerosa y ruidosa hinchada albiceleste que llenó el pabellón Carioca Arena 1 del Parque Olímpico. Sin embargo, el marcador quedó lejos y solo quedó tiempo para la ovación a Ginóbili, Scola, Nocioni y Delfino, integrantes de la Generación Dorada que logró el oro en Atenas y el Bronce en Beijing, además de un cuarto puesto en Londres.

El encuentro representó la despedida de Ginóbili, el jugador símbolo del glorioso ciclo, y de Nocioni, quienes lo confirmaron después del encuentro. Tras la ovación al equipo, Manu regresó a la cancha para el delirio del público y para recibir de manos del árbitro el balón de su último partido en unos Juegos olímpicos.