Un grupo de desconocidos prendió fuego al edificio de dos plantas, ubicado en un barrio céntrico de la ciudad de Oaxaca, donde desde hace medio año se desarrollan duras protestas en reclamo de la renuncia del gobernador Ulises Ruiz.

Nueva Izquierda también aglutina a otros dirigentes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) como Jorge Sosa, detenido hace dos días por las autoridades locales.

El incendio comenzó tras un fin de semana violento, durante el cual militantes de la APPO fueron reprimidos por la Policía Federal Preventiva (PFP).

Los vecinos de la sede de Nueva Izquierda colaboraron hoy en las labores para sofocar las llamas, que consumieron la planta baja del edificio.

Ayer, durante los disturbios, al menos 15 edificios oficiales fueron incendiados o destrozados por activistas de APPO, que trataron de cercar a miembros de la policía en el Zócalo, la principal plaza pública de Oaxaca.

Al menos 160 personas fueron detenidas y más de medio centenar sufrió lesiones.

Entre los inmuebles incendiados figura el del Tribunal Superior de Justicia de Oaxaca, donde unos 6 mil expedientes judiciales penales y civiles fueron reducidos a cenizas.