"A mí no me van a hacer retroceder, y a Cristina menos, sépanlo con toda la fuerza; si me quieren atacar, que me ataquen pero Argentina va a ser un país fuerte, independiente y autónomo en la globalización", afirmó el Presidente.

Kirchner encabezó, junto a Cristina Fernández, hoy en Zárate la puesta en marcha de un sector de la central nuclear Atucha II, la cual, dijo, "va a ser inaugurada en el 2010 por Cristina, dando un ejemplo, como corresponde" y reafirmó así su certeza de que la senadora lo sucederá al frente del Ejecutivo nacional.

En su discurso, el Presidente cargó contra el ex ministro de Economía del gobierno menemista Domingo Cavallo, a quien acusó de haber "cerrado y parado" la obra de Atucha II y puso esa decisión como ejemplo de "lo que significó la década del `90 para todos los argentinos".

"Tengamos memoria porque todos siguen hablando como si creyeran que los argentinos no tienen memoria, o que basta con poner plata en los medios para tratar de que no se recuerde su historia, como hacen algunos habitualmente", advirtió.

El Presidente volvió a pedir respaldo a la ciudadanía para "construir un país del que nos sintamos orgullosos" y juzgó que la inauguración parcial de Atucha II "marca un punto de inflexión en Argentina".

"Ayúdenme, ayúdennos y ayúdenla (en referencia a Cristina); podemos seguir creciendo y hacer un país muchísimo mejor", subrayó Kirchner, de cara a los comicios presidenciales de octubre.

Relató que, antes de iniciar el proceso de reactivación de Atucha II -cuyo contrato de construcción se firmó en 1980 y las obras se paralizaron 1994- "algunas personas cercanas" le dijeron que se trataba de un "gasto público improductivo".

"Gracias a Dios fui fiel a mis convicciones; me puse firme y dije: éste es capital argentino, para los que creen que los argentinos estamos para hacer cosas de segundo orden", reseñó.

Kirchner destacó la labor de unos cien trabajadores que "cuidaron" la planta, "durante los 17 años en los que estuvo parada, y que gracias a eso se pudo reiniciar la obra", que implicará una nueva inversión de "740 millones de dólares".

En el palco junto a Kirchner estuvieron el vicepresidente y candidato a gobernador bonaerense, Daniel Scioli; el ministro de Planificación, Julio de Vido; y el mandatario provincial, Felipe Solá.

En un discurso que pronunció en el inicio del acto, Solá declaró que "Cristina desarrolló la recuperación de la autoestima de los argentinos, con la idea de que no hay que extrañar nada, sino construir lo propio".

"A esta Argentina no la van a golpear así nomás, está firme; la oposición no discute nada, sólo pavadas, por eso vamos a seguir gobernando el país", declaró.

Además, asistieron a la inauguración el secretario de Energía, Daniel Cameron; el intendente de Zárate, Omar Barnués; el ministro de justicia bonaerense, Eduardo Di Rocco; y científicos y trabajadores de la central Atucha II.

Del acto participaron también representantes sindicales de ATE, Luz y Fuerza y Uocra, y militantes del Movimiento Evita y del Frente para la Victoria.