Boca sumó un inconveniente de cara al partido de vuelta de las semifinales de la Copa Libertadores ante Fluminense. Juan Román Riquelme, una de las piezas clave para intentar la clasificación en el Maracaná, está afectado por un cuadro de gastroenterocolitis, por lo que por segundo día consecutivo no pudo entrenarse con sus compañeros. A pesar de la molestia, la presencia de Riquelme no parece correr riesgo, aunque habrá que ver si llega en su plenitud física.

El domingo, un rato antes de que los suplentes y juveniles le ganaran a Arsenal, Riquelme se había presentado a la práctica que llevaron a cabo los titulares, pero un cuadro de fiebre, vómitos y diarrea le impidió participar del entrenamiento. Ayer, el talentoso volante siguió con la misma patología, por lo que directamente ni siquiera concurrió al predio de Casa Amarilla. De todas maneras, no hay indicios que marquen que Riquelme pueda perderse el choque de mañana, aunque es probable que llegue en inferioridad física. Más allá del inconveniente, hoy a las 15 viajará junto al resto del plantel rumbo a Río de Janeiro para ir directamente a realizar el reconocimiento del estadio.

Mientras tanto, Claudio Morel Rodríguez sufre una molestia en los isquiotibiales de su pierna derecha, aunque su presencia también está garantizada. Además, el que regresará como titular es Hugo Ibarra, que superó una sinovitis en su rodilla e ingresará por Jonathan Maidana. Con esa variante confirmada, la única duda que aún tiene el entrenador Carlos Ischia es la del volante derecho. Si se decide por un planteo audaz, el que jugará en esa posición será Cristian Chávez. En cambio, si prefiere equilibrar la mitad de la cancha, el que regresará a la titularidad será el colombiano Fabián Vargas. En consecuencia, la probable formación será con Migliore; Ibarra, Cáceres, Paletta, Morel Rodríguez; Vargas o Chávez, Battaglia, Dátolo; Riquelme; Palacio, Palermo.