DEPORTES › VICTORIA SIN BRILLO EN EL DEBUT EN LA COPA LIBERTADORES
Boca fue el Equi y un poco más
Como en el arranque doméstico, Ezequiel fue clave: conducción, gol y asistencia al Chelo. Echaron al Mellizo y el Pato atajó un penal.
Por Facundo Martínez
En un partido entretenido pero desordenado y de escaso nivel técnico, Boca le ganó, en su debut en el grupo 7, al campeón colombiano Independiente Medellín con justicia pero sin llegar a jugar bien. Nuevamente fueron las individualidades –Ezequiel González, Donnet en la primera etapa, Clemente Rodríguez y Delgado sobre el final, más Abbondanzieri, providencial– las que desnivelaron, porque la línea de juego se vio desdibujada. El Equi y Delgado hicieron los goles al comienzo y sobre el final del segundo tiempo, tras gruesos errores de la defensa rival. Barros Schelotto se fue expulsado junto con su marcador en el primero y Abbondanzieri atajó un penal con el partido 1-0 y a un cuarto de hora del final. Un triunfo para festejar pero no para sonreír tranquilo.
El primer tiempo, en el balance, dejó más oportunidades de gol para Boca pero no evidenció supremacía de ninguno de los dos. En el comienzo, los colombianos se pararon con tres líneas de tres, dispuestos a plantarse bien adelante y con buen manejo coparon el medio. David Montoya, con su manejo, fue el que más se destacó en la visita, acompañado por Cortés y Restrepo. Claro que sin inquietar a un Boca sin buena marca en el medio.
Ese control de Independiente duró diez minutos. A partir de allí Boca ajustó el mediocampo y no bien aceleró en ataque aparecieron las grietas en el fondo colombiano y la inseguridad de su arquero. A los 15, a los 18 y a los 37 y –sobre todo– a los 44, el equipo de Bianchi tuvo oportunidades claras para marcar con remates de Delgado, chilena alta de Guillermo –justamente expulsado, por devolver un golpe–, cabezazo de Donnet y doble remate de González y Delgado en el final. En esa primera etapa Donnet y González fueron los más claros y excepto destellos iniciales de Guillermo, las puntas no rindieron. Caneo se vio liviano y sin pesar.
El segundo fue otra cosa porque un pelotazo de Ibarra a los 5 hizo que chocaran dos defensores y Ezequiel González resolviera con autoridad. Independiente puso un delantero de punta, Serna, para tirarle pelotazos y hubo más espacios para Boca. Tardó en aprovechar. Mejoraron Clemente y Caneo y rondó el gol. El susto del penal –mano de Schiavi– pasó y en el final, en otro quedo del fondo visitante, Delgado aprovechó el toque de Equi y definió.