Tigre también conserva chances, aunque lejanas, de consagrarse campeón del Apertura. Sin embargo, tanto el entrenador del conjunto de Victoria, Rodolfo Arruabarrena, como sus jugadores, sólo apuntan a mantener la categoría, debido a que el equipo se encuentra en zona de descenso directo. Por ese motivo, ni se les ocurre pensar que pueden llegar a una final ante el plantel de Julio Falcioni para definir el torneo. La mira apunta ahora a sumar puntos ante otro rival que también tiene bajo promedio, San Lorenzo.

En ese sentido, Arruabarrena consideró ayer que en caso de conseguir el próximo domingo un empate ante San Lorenzo, uno de los rivales que tiene en la pelea por mantener la categoría, ese resultado pondría “más nervioso” al equipo de Boedo que a ellos. “De los tres resultados, el empate pondría más nervioso a San Lorenzo que a nosotros, pero tenemos que ver cómo va el partido y tal vez a pesar de esa sensación de que el empate nos viene bien, podemos salir a arriesgar”, dijo Arruabarrena.

Sin embargo, el técnico aclaró que en caso de arriesgar no lo hará de manera total sino que lo intentará hacer “con la idea de siempre”. “San Lorenzo no viene haciendo un buen torneo, cambió de técnico, le descontamos muchos puntos pero no podemos bajar los brazos. Sabemos que podemos hacerle daño, pero somos conscientes de que tenemos que estar a la altura del partido”, puntualizó.

Arruabarrena agregó que “el objetivo de Tigre es sumar la mayor cantidad de puntos y si podemos meter en problema a algunos de los rivales directos, mejor”.