Miguel Angel Saucedo, padre del hincha de River asesinado el domingo en el estadio Monumental, minutos antes del partido contra Boca Unidos, aseguró ayer que su hijo “nunca fue barrabrava” y denunció que la institución presidida por Daniel Passarella “se quiere lavar las manos ensuciando” la memoria del joven. Además, negó que él y su hijo hayan estado involucrados en una eventual irregularidad relacionada con el estadio y sus alrededores, como la reventa de entradas, al enfatizar que “nunca” estuvo en “la cancha” y que su hijo “trabajaba y el único hobby que tenía era ir a ver al equipo”. El hombre dijo después que confía en José Campagnoli, a cargo de la Fiscalía de Núñez y Saavedra, a quien definió como “un muy buen fiscal”.

Campagnoli aclaró por la mañana que la policía está cerca de “la captura” del asesino. “La fase de buscar al homicida está hecha. Está prófugo y tiene captura. Estamos dando pasos firmes para su captura”, señaló Campagnoli en rueda de prensa en la puerta de la fiscalía. Según fuentes judiciales, el asesino de Saucedo fue un hincha conocido como El Mati y su apellido es Soria, y el crimen habría sido no por una pelea por el control de la barra brava de River, sino por un ajuste de cuentas por una vieja disputa barrial entre dos bandos de Florencio Varela. Las mismas fuentes señalan que los grupos que participaron de la pelea pertenecen a los barrios La Carolina, donde vivía Saucedo, y El Parque, donde reside el prófugo.

En sus declaraciones, Campagnoli cargó una vez más contra la dirigencia del club de Núñez, a la que acusó de no colaborar con la causa, aunque reconoció que no le extraña esa falta de predisposición. En respuesta a un nuevo comunicado de prensa que difundió el club, en el que calificó de “desmesuradas” e “inadecuadas” sus declaraciones, Campagnoli destacó que “es un comunicado de quien no tuvo empacho en no juntarse con el padre de la víctima, que no recibió las condolencias de un solo dirigente”. Y precisó: “Más que preocuparse por mis apreciaciones, deberían preocuparse por garantizarles a los hinchas que puedan ir a ver un partido tranquilos”.