Se transformó en un clásico del Mundial de Rally, siendo la prueba más austral del campeonato y con 35 años de continuidad en el calendario internacional. El Rally de la Argentina, la cuarta fecha del Mundial, recoge la tradición de más de tres décadas de caminos y velocidad, instaurada en 1980 y radicada desde 1984 en Córdoba, aunque la próxima edición arrancará el jueves 23 próximo con un superespecial en Merlo, provincia de San Luis.

A esta altura, la prueba que organiza el Automóvil Club Argentino, presentada ayer en Libertador 1850, se transformó en la competencia argentina de mayor trascendencia en el mundo. La edición de este año, realizada a un costo superior a los 20 millones de pesos, contará con más de cien participantes, ya que los coches MaxiRally del campeonato argentino fueron homologados para competir contra los autos WRC del Mundial. Uno de ellos será conducido por el ex tenista David Nalbandian, otro atractivo para los fanáticos cordobeses.

Además del nuevo tramo en Merlo (un recorrido de 2,5 kilómetros sobre asfalto y tierra en la rotonda de ingreso a la villa), se recorrerán tramos tradicionales como El Cóndor-Copina, Agua de Oro-Ascochinga o Capilla del Monte-San Marcos Sierra. Se recorrerán 345 kilómetros a velocidad pura en doce pruebas especiales. El campeón mundial Sebastian Ogier (VW) viene invicto en el torneo, tras ganar en Montecarlo, Suecia y México; pero Citröen, Hyundai y los Ford semioficiales intentarán lograr la primera victoria del 2015.