Se terminaron las ilusiones del bicampeonato para Racing. Ayer empató 0-0 en su visita a Banfield y ahora sólo aspira a pelear el lugar de escolta con San Lorenzo y Central, rival este último con el que también se medirá por las semifinales de la Copa Argentina.

El equipo de Cocca salió a jugarse y en los primeros cuarenta y cinco minutos acumuló méritos para ponerse en ventaja, pero chocó contra una notable actuación de Bologna. El arquero de Banfield se lo tapó a Pavone a los once, y un minuto después a Lollo, quien metió un cabezazo abajo, al palo derecho, a la salida de un corner. El uno del local volvió a lucirse ante un potente remate que Bou sacó al pisar el área y más tarde ante Aued, que le pegó desde lejos y lo hizo estirar cuan largo es para sacar la pelota por arriba del travesaño. ¿Y Banfield? Sin Cazares, no tuvo nadie que armara sociedades. Entonces, las llegadas fueron esporádicas. La primera, a los 5 minutos cuando, tras un centro de Cuero mal despejado, Castillón la tiró a la tribuna. Y otra en el final de la primera etapa, con un remate de Erviti que puso en peligro el invicto de Saja.

En el complemento, el equipo de Vivas se adelantó unos metros, buscando mayor protagonismo. Así se abrieron los espacios, porque Racing fue decididamente por un triunfo que alimentara sus ilusiones. Pero le faltó puntería a Pavone, Bou pecó de egoísta y buscó su gol cuando tenía compañeros mejor ubicados y Bologna cerró su arco, más allá del error al descolgar un centro que casi le sirve el gol a la visita. También Saja se anotó un par de muy buenas intervenciones ante un muy activo Viatri. Sin embargo, el partido terminó 0-0, en un resultado mentiroso, que castigó a un Racing que en los noventa minutos hizo más que Banfield.