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Germán Chiaraviglio ganó ayer la medalla de oro en salto con garrocha en el XVII Campeonato Iberoamericano de Atletismo, que se llevó a cabo en el Estadio Engenhao, que será sede de los Juegos Olímpicos.

El santafesino, que el mes pasado sumó su décimo título en el Campeonato Nacional de mayores en el Cenard, superó los 5,50 metros en el tercer y último intento, con lo cual ya se había asegurado el primer lugar. Pero no se conformó y buscó mejorar su performance con 5,60, que consiguió en su segundo intento, pero después no pudo hacerlo en los 5.71, con tres intentos nulos. “Estoy muy feliz. Es una gran alegría ganar otro vez este torneo y un orgullo ratificar la medalla dorada”, expresó Chiaraviglio, que ganó por tercera vez consecutiva el Campeonato Iberoamericano, luego de los títulos conseguidos en Barquisimeto 2012 y San Pablo 2014.

El Engenhao estuvo cerrado dos años por obras y fue reabierto para este torneo previo a los Juegos Olímpicos de Río, donde los atletas pudieron probar la pista azul sintética especialmente construida para la ocasión. “Fue una buena oportunidad de probar y ver la pista. Es muy diferente a la del 2007, cuando tuve que saltar bajo una gran lluvia”, remarcó Chiaraviglio, que en aquella oportunidad se quedó con la presea de bronce, al tiempo que destacó la alta temperatura del mediodía carioca: “Hizo como 32 grados. Por suerte en los Juegos voy a saltar de noche”.

“Me voy con una noción bastante clara de lo que me voy a encontrar cuando vuelva en agosto”, finalizó el atleta de 29 años, que consiguió dos veces la marca mínima exigida para clasificar a Río (5,70), primero en el Campeonato Sudamericano de Lima, en junio, y luego en el Juego Panamericano de Toronto, en agosto, con 5,75, ambos eventos en 2015.