DEPORTES › EL CRITICO MOMENTO DE TABAREZ EN BOCA
Al Maestro lo corre el reloj
Las tres derrotas consecutivas en una semana enrarecieron el clima. Flojos resultados, una alarmante falta de gol y hasta algunos problemas internos le ponen presión a la situación.
Por Ariel Greco
Oscar Tabárez está viviendo un momento muy crítico en su segundo paso por Boca. Con tres derrotas seguidas en ocho días, entre ellas la goleada en el Superclásico ante River, el técnico está siendo cuestionado por los hinchas que no olvidan el paso de Carlos Bianchi. Flojos resultados, una alarmante falta de gol y hasta algunos problemas internos con los jugadores son algunos de los factores que se juntaron para este particular momento que vive Boca.
En lo que va del año, el conjunto de Tabárez jugó once partidos oficiales, de los cuales apenas ganó cuatro, dos por el campeonato local y dos por la Libertadores. Además, sólo convirtió 12 goles, lo que le da un promedio de 1,09 tanto por encuentro. Pero lo más preocupante es que en cinco de esos encuentros no anotó ninguno. Para colmo, para aumentar la tensión entre los hinchas, tres de ellos ocurrieron en la última semana: 0-3 con River en la Bombonera, 0-1 con Santiago Wanderers y 0-1 con Lanús.
Desde que asumió Tabárez, unos de sus primeros pedidos fue un nueve de área. Luego de la negativa de la dirigencia, cambió el discurso por un “me arreglo con lo que tengo” de compromiso. Sin embargo, con la racha negativa en marcha, desde todos los sectores se coincidió en el diagnóstico. Lo dijo el propio técnico; lo insinuó Mauricio Serna –”nos falta peso ofensivo”–; lo afirmó con contradicciones Juan Román Riquelme –”con estos delanteros Boca ganó la Libertadores”, “vendieron medio equipo y no trajeron a nadie”–; y hasta lo reconocieron los dirigentes. Desde los números, los datos sobre la ausencia de un goleador son contundentes. Los doce tantos de Boca en el año los convirtieron diez jugadores diferentes. Sólo Riquelme, ante Gimnasia y Colón, y Barros Schelotto, ante Colón y Emelec, ambos de penal, se repitieron en el marcador. En contrapartida, en River, Fernando Cavenaghi y Ariel Ortega llevan quince goles entre ambos, sólo teniendo en cuenta el Clausura.
Otra de las máximas de Tabárez desde su retorno al club fue pedir que no se lo comparara con el ciclo de Carlos Bianchi, y en todo caso, hacerlo con el último equipo, con casi los mismos jugadores. En el Apertura, con Bianchi como entrenador, Boca tenía la misma cantidad de puntos, con una campaña idéntica: dos triunfos, tres empates y dos derrotas. Sin embargo, hay dos detalles que favorecen a la anterior gestión. En siete partidos, Boca había conseguido trece goles, con un promedio de casi dos por encuentro. El otro tiene que ver con la tendencia en alza que mostraba el equipo en aquel momento. Luego de caer en los dos primeros partidos, a esa altura llevaba cinco partidos invicto. Ahora el panorama es inverso, ya que el conjunto de Tabárez hace cuatro jornadas que no gana, con dos caídas consecutivas.
A ocho puntos de River, y sobre todo por el flojo rendimiento que exhibe, Boca parece no tener demasiadas chances en el Clausura. En cambio, todavía se mantiene con posibilidades intactas en la Libertadores. Claro que en este certamen tampoco su rendimiento dejó satisfechos a los simpatizantes. Con dos triunfos, un empate y una caída, todavía debe luchar para asegurarse su clasificación, en un grupo que pintaba muy sencillo. A esta altura, en la edición anterior con cuatro triunfos seguidos ya había asegurado su pasaje a los octavos de final.