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El entrenador de Boca, Jorge Benítez, y el capitán del equipo, Diego Cagna, evaluaron positivamente el trabajo de los jugadores en la derrota ante San Lorenzo, pese a que ese resultado los privó de levantar la copa en el pentagonal del verano. “Boca jugó a un muy buen ritmo, me gustó mucho más que el otro día. Me encantó el trabajo de los muchachos”, manifestó Benítez antes de partir a Buenos Aires, dando por terminada la pretemporada en la ciudad de Tandil.
“Se jugó muy bien, se manejó la pelota. Creo que no cometimos ningún error. A pesar de que ellos tienen jugadores muy rápidos, los pudimos contener. Nosotros fuimos los que propusimos y eso es lo importante. Ellos hicieron un gol y se metieron atrás”, remarcó Benítez. “No hay muchas cosas como para que me preocupe demasiado. Lo que me importa es que el equipo no se desarma atrás, no le llegan por sorpresa”, agregó el entrenador, quien confesó que todavía su equipo está en “seis puntos” de su verdadero potencial.
El Chino volvió a insistir con la necesidad que el equipo tiene de reforzarse con un conductor. “Los dirigentes saben qué jugador quiero. Si no traen el refuerzo que pretendo, no quiero a nadie más”, sentenció el ex volante derecho. A Benítez le interesa el volante de Colón, Giovanni Hernández, por quien el club santafesino pide 7 millones de dólares, una suma que los directivos boquenses –que siguen intentando contratar a Guillermo Marino, de Newell’s– no estarían dispuestos a desembolsar.
Similar visión del encuentro ante el conjunto de Héctor Veira tuvo el capitán de Boca. “La verdad es que queríamos ganar. Jugamos un buen partido y creo que fuimos superiores. Nos faltó un poco de profundidad, porque tuvimos mucho la pelota, la hicimos rotar y nos faltó certeza en los últimos metros. Pero el balance es bueno, debido a que estamos yendo de menor a mayor. Ayer (por el jueves) nos sentimos mejor que en el partido del sábado pasado contra River”, completó Cagna. Boca ya está en Buenos Aires y mañana cerrará su pretemporada ante River.