DEPORTES
Al G-8 le preocupan más los Juegos que la cumbre
París y Londres se pelean por conquistar la organización de los Juegos Olímpicos del 2012. Tony Blair hace lobby en Singapur, sede de la elección; Jacques Chirac estará en la presentación de la candidatura parisina antes de volar a Escocia.
Por Pablo Vignone
París y Londres pueden estar unidas por el tren de alta velocidad que cruza el Eurotunnel en tres horas, pero se enfrentan en una batalla campal por la elección de la sede de los Juegos Olímpicos del 2012, que se realizará esta madrugada en Singapur. Una batalla dialéctica que incluye acusaciones directas y un lobby sensacional por capturar el negocio que a Atenas, sede de los Juegos del 2004, le reportó casi 1500 millones de dólares en ganancias y a Grecia un aumento del PBI de varios puntos anuales en carrera hacia los Juegos gracias a las obras. En ese marco, la polémica reunión del G-8 en Gleneagles, Edimburgo, quedó en un segundo plano, ya que tanto el premier británico, Tony Blair, como el primer ministro francés, Jacques Chirac, se concentraron, con distintas estrategias, en la elección. Madrid, Nueva York y Moscú compiten desde atrás, con menores chances.
París, que ya organizó los Juegos en 1900 y 1924, viene ganando las encuestas: según L’Equipe, el 67 por ciento de las personas consultadas en Francia, el 50 en España y el 42 en Gran Bretaña piensan que París será la sede; sólo el 36 por ciento de los británicos cree en la victoria de Londres y el 34 por ciento de los españoles, en la de Madrid.
Pero Londres, sede de los Juegos en 1908 y 1948, ha reducido en el recuento de posibles votos la ventaja de los últimos meses, aunque no de manera decisiva. Al frente de la candidatura londinense se mantiene el ex atleta Lord Sebastian Coe, de aceitados vínculos en el cortesano mundo del Comité Olímpico Internacional, pero desde el domingo fue el mismo Blair quien encarnó la suerte de la candidatura y se dedicó a contactar y discutir personalmente las chances de Londres con un gran número de delegados del COI.
Blair abandonará hoy Singapur, una ciudad-Estado que fuera colonia británica hasta 1965, para volar con urgencia a Gleneagles: como anfitrión, debe abrir las sesiones del G-8. Pero Chirac se tomará un día más en llegar a la cumbre, ya que hoy arriba a la ciudad asiática para participar directamente en la presentación de la candidatura, algo que su colega no podrá realizar.
No son los únicos representantes del mundo de la política que se movilizan para conseguir la sede para sus ciudades, y de paso fabulosos contratos para las empresas locales. Cuando un informe secreto del Ministerio de Asuntos Exteriores español alertó que la candidatura de Madrid, la tercera en discordia, tenía chances de pelear la sede, el rey Juan Carlos y el primer ministro José Luis Rodríguez Zapatero se repartieron la misión de contactar a jefes de Estado y de gobierno. Rodríguez Zapatero llegaba hoy a Singapur junto a dos de sus ministros y el presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy; la reina Sofía está desde ayer, entre una comitiva de 300 personas.
Las hostilidades alcanzaron un momento de altísima tensión cuando los británicos criticaron ayer las instalaciones del Stade de France –sede de la final del Mundial 1998–, elegido por París para ser estadio olímpico. “Ese estadio es maravilloso para ver rugby, pero desgraciadamente el rugby no forma parte de los Juegos”, dijo ayer el arquitecto Rod Sheard, que trabajó en el diseño del nuevo estadio olímpico que Londres piensa construir. Las reglas del COI permiten que los candidatos hagan lobby sobre los miembros electores, pero impide que critiquen a otros candidatos. Sin embargo, Jacques Rogge, presidente del COI, desestimó ayer que se hubiera cometido una falta. Francia reaccionó, por medio de su ministro de Deportes, Jean François Lamour, denunciando “agresividad” y “falta de ética”. “Nosotros al menos ya tenemos el estadio”, deslizó ácidamente. “Ese estadio, moderno, tenía 20 años de adelanto, lo que tal vez moleste a otras candidaturas.”
Nueva York y Moscú parecen fuera de carrera, pero no se resignan. “El 6 de julio es el 59º cumpleaños del presidente George Bush y sé lo que le voy a ofrecer de regalo”, dijo en Singapur el jefe de la candidatura neoyorquina, Roland Betts, amigo personal del mandatario, que no viajará a Singapur. Sí lo harán Hillary Clinton y Muhammad Alí; el alcalde de Moscú, Yuri Luzhkov, dijo ser “optimista” porque “la elección de Moscú sería similar a la de Pekín, se trataría de algo histórico”.
Unos 2 mil guardias armados, incluidos los tristemente célebres gurkhas, custodian el Rafles City Convention Centre, donde los 99 miembros del COI –entre ellos, y por última ocasión, el coronel (RE) Antonio Rodríguez– elegirán, en el marco de la 117ª Asamblea, la sede de los Juegos 2012. ¿Quién ganará? “Las mismas consideraciones geopolíticas que se tuvieron en cuenta hace cuatro años con Pekín no son aplicables ahora. La calidad de los informes técnicos prevalecerá”, afirmó Rogge.