El entrenador Gustavo Alfaro, sin consenso en la dirigencia, con poco respaldo en el plantel e insultado por los hinchas, fue despedido ayer de San Lorenzo, después de una reunión mantenida con el presidente del club, Rafael Savino, y el tesorero, Pascual Palladino. El principal candidato para sucederlo es el ex jugador y director técnico del club Oscar Ruggeri, quien ya fue contactado por la dirigencia y hoy se entrevistará con Savino para arreglar su contrato.

Savino, única autoridad de San Lorenzo que sostenía al director técnico, declinó su postura y aceptó el mandato del bloque oficialista que el domingo, tras la derrota con Independiente, exigió la cesantía del ex Quilmes. Por eso, el presidente le pidió una reunión al entrenador después de la práctica de ayer para acordar los términos de la salida. Como sabía que el entrenador pretendería cobrar la totalidad del contrato, que vencía el 30 de junio próximo, el tesorero de club, Pascual Palladino, y el abogado Jorge Lenon también asistieron a la reunión. En ella, Alfaro mantuvo su posición de no renunciar al cargo, como lo había expresado después del clásico, y Savino le comunicó entonces su necesidad de echarlo del club ante la presión del resto de los dirigentes y de la hinchada.

Desvinculado Alfaro, todo indica que el reemplazante será Ruggeri, que ya dirigió al equipo durante la gestión de Fernando Miele. El ex defensor, que ya fue contactado en su ciudad, Corral de Bustos, llegará hoy a Buenos Aires y se reunirá con las autoridades de la institución para recibir formalmente la propuesta y cerrar su contrato. Ambas partes deberán solucionar durante la negociación el problema de una abultada deuda que mantiene el club por su gestión anterior.