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La Conmebol negó que hubiera cambiado al árbitro designado para el partido entre Argentina y Paraguay y aseguró que las suspicacias son producto de inventos. “Nunca. Eso de que se cambió es absolutamente falso”, dijo el paraguayo Carlos Alarcón, presidente de la comisión de árbitros de la Conmebol, en una entrevista radial en Asunción. El árbitro designado para dirigir es el brasileño Sandro Ricci, el mismo que mostró la tarjeta roja a Edinson Cavani tras el polémico episodio con Gonzalo Jara en el Chile-Uruguay y que expulsó también a Gerardo Martino, en un duelo de la fase de grupos.

El jefe de los árbitros sudamericanos insistió en que el cambio de árbitro lo “inventaron”. “No había ningún árbitro designado, lo decidimos anoche (por el domingo) después de las 20”, afirmó Alarcón, que catalogó a Ricci de “gran árbitro”, pero añadió además que “no había otro”.

“Analicen bien y verán que no había otro”, dijo el paraguayo, pese a que no quiso determinar cuántos árbitros quedaban habilitados para poder dirigir en las semifinales.

“Se analizaron todas las situaciones y se nos complicó bastante”, admitió Alarcón, quien además defendió al árbitro brasileño. “No se puede desconocer que es un gran árbitro”, dijo. “Fue considerado el mejor del Mundial de Brasil por parte de la prensa, incluida la europea. Que se le escapen algunas cosas no le quita méritos para dirigir partidos de tanta trascendencia como éstos”, agregó.

“Muchas cosas se pueden decir, pero la comisión deliberó largamente y optamos por lo creíble. Poner un brasileño cuando juegan Paraguay, Argentina o Uruguay da tranquilidad a todas las partes. Y la gente está más tranquila. Un brasileño es el ideal.”

También negó que Ricci hubiera sido desafectado de la Copa América por su polémico arbitraje en Chile-Uruguay. “No sé de dónde salió esa historia”, dijo. “No sé si fue de Brasil o de dónde salió eso. Se desmintió inmediatamente. Se inventaron demasiadas cosas.”