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Fabiola Ocampo Calvo se crió en Cartago, Valle del Cauca, en la zona cafetera. Su familia estaba compuesta por papá, mamá, tres hermanos y dos hermanas. El padre era negociante de frascos. Viajaba por todo el país y vendía a los grandes laboratorios. Fue el mejor frasquero en su momento, recuerda Fabiola. Su madre cuidaba de su familia.

Sus tres hermanos varones fueron asesinados en los 80. Dos por su participación política, uno por ser “hermano de”. En ese contexto ella, su pareja e hijos, decidieron exiliarse en España para salvar sus vidas.

El proceso de paz firmado el pasado 23 de junio no es el primero que se inicia en Colombia en pos de terminar con el conflicto armado. Tampoco será el último, ya que queda todavía alcanzar un acuerdo con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), segunda guerrilla activa, y terminar con las bandas criminales remanentes de grupos paramilitares.

En 1984, el gobierno del presidente Belisario Betancour fue el primero en buscar acciones para llegar a la paz. En ese contexto, se inició el Proceso de Paz, en que el EPL, a través de su representante Oscar William Ocampo Calvo, firmó la paz y propuso convocar a una Asamblea nacional Constituyente para encarar una reforma política y entrar a la legalidad. Sin embargo, los militares no acataron las treguas, atacaron a campamentos, a voceros de las guerrillas y produjeron algunos asesinatos. En 1985 mataron a Oscar William, cabeza visible del proceso de paz (junto a otros voceros de las FARC y del M19). Y en 1987 a Jairo Ocampo Calvo (comandante Ernesto Rojas). En 1991 el EPL se desarmó y entregó las armas el nuevo Estado Constitucional.

Fabiola Ocampo Calvo recién pudo volver a Colombia en 2007.

Entonces asumió como coordinadora de la Red Colombiana de Periodistas con Visión de Género en Colombia. Dirigió el programa Ni reinas ni cenicientas, en el canal Capital de Bogotá, donde mostró su vocación para dar a las mujeres el espacio que corresponde en una sociedad. Impulsó la creación de la editorial independiente Acracia (Tierra de libertad) y empezó a publicar sus libros.

Estuvo en Buenos Aires a fines de julio para participar del lanzamiento de la Red de Periodistas con Visión de Género de las Américas.