La asamblea de productores de Gualeguaychú decidió pasar a un cuarto intermedio hasta hoy al mediodía, a la espera de una definición sobre las medidas que tomarán las entidades agropecuarias. Lo mismo ocurrió en Paraná y en otras zonas de la provincia de Entre Ríos. Sin embargo, el clima se fue enrareciendo con el correr del día. Durante las cinco horas que duró la reunión que mantuvieron los presidentes de Federación Agraria, Sociedad Rural, Confederaciones Rurales y Coninagro, los productores a la vera de la ruta comenzaron a especular con nuevas medidas de fuerza, que iban desde cortes de ruta totales, un nuevo lockout granario, e incluso llamar a una rebelión fiscal. Las terceras líneas de las entidades, los que están en las rutas, aseguran que ya les es difícil contener a las bases y que frente a este clima de desconcierto y tensión, “todo puede pasar”.

Ante las indefiniciones de la jornada de ayer, y con un clima espeso, los productores empezaron a juntarse a la vera de las rutas, sobre todo cuando se enteraron de que la reunión entre el Gobierno y las entidades agropecuarias se había suspendido. En Paraná realizaron un corte simbólico durante la tarde, que duró una hora. Por la noche, pasaron a un cuarto intermedio. Sin embargo, los productores dejaron trascender que quieren profundizar las medidas de fuerza. “Se escuchan propuestas que van desde la rebelión fiscal hasta cortes totales de ruta. Las asambleas quieren endurecerse”, afirmó a Página/12 Alfredo Bell, dirigente de la Federación Agraria de Entre Ríos.

Desde Gualeguaychú, sobre la ruta 14, a la altura del kilómetro 53, la situación era similar. “El ánimo de los productores es muy malo, está todo bastante tenso. Costó mucho sacarlos de las rutas, y ahora sienten que se les toma el pelo. Frente a este escenario, todo puede pasar”, graficó Juan Ferrari, dirigente de la Federación Agraria entrerriana. Frente a las “advertencias” de Alfredo De Angeli, que dijo durante toda la tarde que “el Gobierno quiere anarquizar y dividir a las entidades”, los productores piensan en voz alta cuáles serán los próximos pasos.

“Se habla de todo tipo de medidas de fuerza, cortes intermitentes, un nuevo paro granario, sin cortar el diálogo nunca. Tenemos que seguir ‘visitando’ a los intendentes, gobernadores y concejales para que digan de qué lado están”, señaló Domingo Veronese, de la Sociedad Rural de Gualeguaychú. Hoy al mediodía realizarán una asamblea donde se resolverán los pasos a seguir. “El Gobierno dice que quiere negociar y luego cancela la reunión. Se les acabaron los pretextos, es muy poco serio lo que hacen”, señaló a Página/12, Javier Menchiori, presidente de la Sociedad Rural de Gualeguaychú.

Los dirigentes intermedios, los que están a los costados de las rutas con el resto de los productores, reconocen que ya no tienen más argumentos para mostrarles a las bases y contenerlas. Por lo menos es lo que dejan trascender. Muchos esperaban confiados un nuevo encuentro con el Gobierno, luego del acto en Rosario. Incluso, se rumoreaba entre ellos cuáles iban a ser las medidas pensadas por el Ejecutivo. Pero el encuentro no ocurrió. “La verdad es que todos tenían fe que con la asamblea de Rosario, hoy (por ayer) sería la última reunión con el Gobierno. Estamos totalmente desorientados y los ánimos están muy caldeados”, indicó a este diario Héctor Tóler, un productor citrícola de Chajarí.

Dentro de este clima tenso, que los dirigentes intermedios digan que ya están sobrepasados y no pueden contener a las bases puede ser leído también como una herramienta más de presión. Al decir de Eduardo Buzzi, presidente de la Federación Agraria, los productores quieren “manifestar su descontento”. “Se está complicando la contención del productor, que quiere salir a la ruta a matar o morir. Pero estamos tratando de sostener la cosa. Hasta el kiosquero quiere que el conflicto se pudra, que se vaya a un paro total, por dos o tres días, para que terminemos arreglando”, concluyó Tóler.