Desde la Comisión de Presupuesto de la Cámara baja adelantaron que antes de fin de año el Poder Ejecutivo enviará la modificación del impuesto a las Ganancias, con un escalonamiento más progresivo de la famosa “tablita de Machinea”. Algunos sectores del oficialismo interpretaron ante PáginaI12 que esta modificación “ayudaría a evitar una caída en el consumo de los sectores medios”, en un contexto de crisis económica. Por otro lado, los legisladores K emitieron ayer dictamen de mayoría sobre la prórroga de la Emergencia Económica, y los impuestos al Cheque y Cigarrillos, sumado a una modificación de los gravámenes a los Bienes Personales. El oficialismo intentará aprobar todas estas iniciativas –a través de una preferencia– el próximo miércoles. La oposición (UCR, CC, PRO y los peronismos disidentes) presentará proyectos en minoría.

El Poder Ejecutivo decidió extender las sesiones ordinarias del Congreso hasta el 31 de diciembre. Antes de esa fecha, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner podría anunciar la modificación de la “tablita de Machinea”, tema que está en estudio desde hace varios meses. Los contribuyentes afectados por la “tablita”, es decir los trabajadores que tienen ingresos superiores a los 7000 pesos, oscilan entre los 200 y 300 mil. “Aquellos que dejen de pagar este impuesto o lo hagan en una menor proporción, destinarán más dinero al consumo.” Esa fue la interpretación que hicieron a este diario desde el oficialismo en Diputados.

Cuando pasan los 7000 pesos de remuneración neta, los empleados pierden el 50 por ciento de las deducciones (mínimo no imponible, cargas de familia y otras). Eso hace que el monto tributado salte, por ejemplo, en 200 pesos por un aumento de sueldos de 100 pesos (de 6950 a 7050 pesos, para el caso). La propuesta que presentó la AFIP “suaviza” la tablita, proponiendo que en un primer tramo sólo se reduzca la deducción aplicable en cuatro o cinco puntos, en un segundo tramo nueve o diez puntos, y así sucesivamente, hasta llegar al mismo punto en el que se grava el total de ingresos netos sin deducciones (para remuneraciones muy elevadas) con el sistema actual.

Pero antes del impuesto a las Ganancias será el turno de la prórroga de la Emergencia Económica y el Impuesto al Cheque. “Hace un mes, ambas prórrogas serían un escándalo, pero hoy la crisis financiera nos da argumentos de sobra para volver a impulsarlas”, aseguró a PáginaI12 el titular de la Comisión de Presupuesto, Gustavo Marconato. La Emergencia Económica delega al Ejecutivo la potestad para renegociar los contratos con las empresas privatizadas, y mantener el estado de emergencia alimentaria y ocupacional (planes Jefas y Jefes de Hogar). En este punto, Claudio Lozano solicitó introducir algunas modificaciones en el capítulo social de la Emergencia, que fueron reconocidos por el oficialismo (ver página 5).

Sobre el impuesto al Cheque, la oposición solicitó la total coparticipación de esos ingresos. Hoy el 70 por ciento va para la Nación y el 30 para las provincias. Y de este porcentaje, una parte va para el financiamiento de la Anses. Quizás ésta sea la iniciativa que acarreará más críticas en las próximas semanas.

Tanto la UCR, la CC, el PRO y los peronistas disidentes (Frejuli y el nuevo Unión Peronista) quieren que los recursos de ese impuesto vuelvan a las provincias en su totalidad. Sin embargo, desde el oficialismo son enfáticos: el Impuesto al Cheque es el cuarto pilar de ingresos para el Estado y no se toca. “Sin este impuesto, se cae el superávit”, vaticinaron los diputados K. Pero la discusión más ardua sobre este impuesto se dará en la Cámara alta, porque son los senadores quieren reciben la presión directa de los gobernadores.