El hijo de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, Máximo Kirchner, “presenta una buena evolución posoperatoria” tras la intervención quirúrgica a la que fue sometido el lunes pasado en el Hospital Universitario Austral, de Pilar, pero podría permanecer internado la semana que viene, según el nuevo parte médico dado a conocer ayer. “El paciente Máximo Kirchner presenta una buena evolución posoperatoria. Se encuentra con buen estado general, afebril y sin dolor; y ha descansado adecuadamente”, destacó el informe, que además señaló que el hijo de la jefa de Estado, operado a raíz de un cuadro de artritis séptica en la rodilla derecha, “ha comenzado el plan de rehabilitación kinesiológica” y “continúa recibiendo medicación antibiótica endovenosa”. Por último, el parte firmado por el doctor Luis Buonomo, de la Unidad Médica Presidencial; Eduardo Schnitzler, director médico del Hospital Universitario Austral, y Carlos Autorino y Horacio Rivarola Etcheto, del Servicio de Ortopedia y Traumatología del mismo centro asistencial, agregó que “en principio se prevé un período de internación aproximado de una semana”.