“Nos vamos con las manos vacías”, dijo ayer Julio Aimar, de la Cuenca Lechera Abasto Sur. Fue después de la reunión en el Ministerio de Economía, de la que participaron varios funcionarios de esa cartera y de Agricultura. Los productores vinculados a la Mesa Nacional de Lechería –y a las patronales agropecuarias– le reclamaron al gobierno nacional un subsidio de 30 centavos por litro de leche vendida. Sin embargo, los funcionarios habían dejado en claro de antemano que en ese encuentro no se discutirían precios pero sí comenzaría una etapa de análisis de costos para recomponer la cadena en el mediano plazo. En este contexto, hubo una propuesta de productores santafesinos (opuestos a la Mesa Nacional de Lechería) para realizar una próxima reunión en Rafaela (Santa Fe), junto a las autoridades provinciales y nacionales donde sí se discutiría una recomposición de precios que debería ser garantizada por la industria.

“La coyuntura se resuelve entre ustedes y nosotros. Acá vinimos a una reunión técnica”, fue la respuesta de otros productores, Ricardo Garnero (Santa Fe) y Alejandro Leveratto (Córdoba), al reclamo de Aimar y Manuel Ocampo, de la Asociación de Productores de Leche. “Ofrecemos realizar una reunión en Rafaela con los dueños de las empresas (tambos) y la industria, que se comprometería a garantizar una recomposición en el pago al productor durante 60 o 90 días”, explicaron Garnero y Leveratto. En ese plazo, la subsecretaria de Competitividad podría estudiar los costos del sector y elaborar una propuesta a mediano plazo.

Esta propuesta descolocó a los representantes de la producción y la industria que responden a los intereses de las patronales del campo, como la Sociedad Rural, Federación Agraria, CRA y Coninagro. “Fue un pase de facturas para el perfil agromediático de algunos dirigentes”, sostuvo a Página/12 uno de los asistentes al encuentro.

“La Mesa Nacional de Productores de Leche manifiesta su decepción por el incumplimiento de las promesas asumidas. El Gobierno es el único que puede dar soluciones en la actual coyuntura”, reclamó la Sociedad Rural a través de un comunicado. Desde el Gobierno dicen que continúan con su compromiso de analizar la estructura de costos del sector.

Ayer hubo aproximadamente treinta industrias lecheras bloqueadas. Un comunicado de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) detalló que los principales puntos de la protesta se ubicaron en Santa Fe, en las zonas de Rafaela, Esperanza, Freyre, San Guillermo y Suardi, y en Córdoba en la región que comprende desde San Francisco hasta Villa María.

El año pasado se produjeron 11.600 millones de litros de leche, de los cuales 8800 millones se consumieron en el mercado interno y el resto tuvo destino de exportación. Para 2012 se espera una producción cercana a los 12.000 millones de litros. Entre 2003 y 2011, la producción creció un 48 por ciento y entre la década de 1990 y 2011 tuvo un incremento de 95 por ciento. En 2011, la facturación del mercado doméstico fue de 136.527 millones de pesos, un 24,7 por ciento más que en 2010. Y la facturación al exterior fue de 1700 millones de dólares.

Actualmente, los productores tamberos están recibiendo de la industria entre 1,50 y 1,60 peso por litro de leche, un valor similar al del año pasado.

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