El gobernador de Mendoza, Paco Pérez, y el presidente de YPF, Miguel Galuccio, acompañaron a CFK.
Imagen: Télam.

El Gobierno inauguró ayer dos nuevas plantas de hidrotratamiento de gasoil y de naftas en el Complejo Industrial de YPF en Luján de Cuyo, Mendoza, que requirieron una inversión de 2600 millones de pesos, la mayor de los últimos 25 años en esa refinería. El acto estuvo encabezado por la presidenta Cristina Fernández, junto al titular de la petrolera estatal, Miguel Galuccio. La inversión permitirá a YPF producir combustibles con bajo contenido de azufre, que reduce el daño ambiental y sobre los motores de los vehículos. También se inauguró un nuevo conjunto de equipos para transportar shale desde la provincia de Neuquén. “Tenemos que hacer un gran esfuerzo por defender lo público. Ese patrimonio intentó ser dilapidado y nosotros lo estamos recuperando”, señaló CFK. A los trabajadores petroleros les pidió: “Cuiden lo que hemos logrado”.

La mandataria resaltó el ritmo inversor que mostró YPF en el último año y el hecho de haber aumentado la actividad de refino en un 33 por ciento. Adelantó que en la jornada de hoy, el ministro de Planificación, Julio De Vido, inaugurará una compresora de gas que permitirá duplicar el suministro de ese hidrocarburo a la provincia de San Juan. Luego la cementera Loma Negra, dijo la Presidenta, invertirá en una nueva fábrica para abastecer a la región y reducir costos logísticos. En teleconferencia, por otra parte, entregó becas para la carrera de ingeniería en petróleo en la Universidad de Florencio Varela. También participaron del acto el gobernador de Mendoza, Francisco “Paco” Pérez, y el secretario de Obras Públicas, José López.

La unidad de hidrotratamiento de gasoil permitirá desulfurizar 2640 metros cúbicos diarios, para obtener un producto final con un contenido de azufre inferior a las 10 ppm (partes por millón). Por su parte, la nueva planta de tratamiento de naftas tiene la capacidad de desulfurizar 1450 metros cúbicos diarios de combustible, lo que “mejorará las especificaciones en materia ambiental en línea con las nuevas tecnologías de motores nafteros”, informó la empresa. El tratamiento del gasoil y las naftas, además, requirió de una nueva unidad de hidrógeno. También se construyeron en el complejo tres nuevos tanques de almacenamiento, con una capacidad de 54 mil metros cúbicos. La inversión generó dos mil empleos directos. Luján de Cuyo es la segunda refinería más grande de YPF, detrás del complejo de La Plata. Tiene una capacidad para refinar 105.500 barriles de crudo por día y fabrica todos los productos que comercializa YPF.

La mandataria también dedicó parte de su discurso a criticar, aunque sin mencionarla, a Repsol, que dirigió a YPF hasta la recuperación estatal instrumentada el año pasado. “Otro de los logros de la actual gestión de YPF es haber aumentado en un 50 por ciento el stock de combustible disponible en las estaciones de servicio. Antes, tal vez algunos pensaban en desgastar a un gobierno, entonces se remitían todas las ganancias al exterior y no se invertían en la Argentina. Es impensable que una empresa no quiera lo mejor para el país en el que se desempeña. Sin embargo, de fronteras para adentro ellos cuidan sus empresas y sus intereses como nadie, y sus embajadores en nuestro país nos lo hacen saber”, dijo.

Consultado por este diario, el director del Centro de Estudios de Energía, Política y Sociedad (Ceepys), Víctor Bronstein, explicó que “la inversión permitirá mejorar la calidad de las naftas y aumentar su producción. Atenderá el importante incremento del consumo de combustibles que apareció en estos años de la mano de la mayor venta de autos. En los últimos años no se hicieron grandes inversiones en temas de refino, en el segmento de downstream”. Además de las mejoras en Luján de Cuyo, CFK inauguró una nueva batería de equipos de crudo no convencional que posibilitarán poner en producción pozos de shale. Los equipos tienen una capacidad para el tratamiento, compresión y transporte diario de más de 1000 metros cúbicos de petróleo y 250 mil metros cúbicos de gas.