El Banco Central adquirió ayer en el mercado de cambios unos 630 millones de dólares, de los cuales 500 millones correspondieron a la liquidación de un tercio de los fondos captados por YPF en su reciente colocación de obligaciones negociables. Se trata de la compra más abultada desde que se creó el Mercado Unico y Libre de Cambios (MULC), confirmaron fuentes oficiales. Como resultado de esta intervención, las reservas aumentaron en 537 millones de dólares para ubicarse en 33.216 millones, su mayor nivel desde el 4 de noviembre de 2013. A diferencia del ingreso de los dólares provenientes de la colocación de deuda por parte del Estado nacional a través del Bonar 2024, la liquidación de las inversiones de la petrolera se canaliza mediante el mercado de cambios como sucede con cualquier empresa privada. El presidente del BCRA, Alejandro Vanoli, destacó en declaraciones radiales el “importante suplemento” a las reservas que significaron los fondos captados por ambas operaciones, por fuera de las compras de divisas que realiza habitualmente la entidad, y ratificó que “las expectativas de devaluación no tienen sustento”.

Las colocaciones de deuda que realizaron el Gobierno y luego la petrolera le aseguraron a Vanoli una inyección de fondos cercana a los 2900 millones de dólares con destino a las arcas del Central. La ampliación de la serie Bonar 2024, que ofreció el martes pasado Economía, representó el ingreso de 1415,9 millones de dólares que a las 48 horas se sumaron al stock de reservas. Los fondos se integraron de manera directa porque se trató de endeudamiento del Tesoro. Ese mismo jueves YPF consiguió otros 1500 millones de dólares –recibió ofertas por 5100 millones– a diez años. Tal como sucedió con el dinero del Bonar, se esperaba que el proveniente de YPF comenzara a arribar ayer. Por la mañana el titular del Central confirmaba que ingresaría “entre hoy y mañana” (por ayer y hoy).

“Hoy el Banco Central compró una cifra record en el mercado de cambios. Las reservas internacionales siguen subiendo”, informó Vanoli a través de su cuenta en Twitter. “Aumentan los depósitos en pesos y dólares. Aumenta el crédito. Logramos estabilidad financiera. Baja la inflación. Vamos por más crecimiento”, agregó en otros 140 caracteres. La compra provino de la liquidación de un tercio de los fondos de YPF a través del Banco Nación. De esta manera, el Central absorbió 630 millones de dólares para sus reservas. El organismo además abonó compromisos por importaciones de energía por 43 millones de dólares, a la industria fueguina por 28 millones y por la compra de material ferroviario por 26 millones. Las reservas su ubicaron entonces en su mayor nivel en más de un año y medio. La AFIP informó que se vendieron 16,1 millones de dólares en moneda extranjera para ahorro, mientras que en abril ese ítem acumula operaciones por 450,1 millones. En tanto, el Central logró una absorción de 6760 millones de pesos a través de su colocación de letras y notas, sobre las cuales llevó a cabo un recorte en las tasas de interés de entre 10 y 25 puntos básicos en todos los plazos ofrecidos al sistema. En el caso de las letras a 91 y 119 días la autoridad monetaria ya había dispuesto un recorte de tres puntos básicos en sus rendimientos, los cuales sirven de referencia (como porcentaje) a los bancos como techo para el costo crediticio y como piso para la remuneración de los depósitos minoristas.

“La única respuesta a los ataques son los resultados. Más reservas, baja del tipo de cambio ilegal. Siguen bajando los futuros y el BCRA gana”, fue el último tuit de Vanoli. La divisa cotizó con un alza de medio centavo a 8,91 pesos, mientras que la versión ilegal se ofreció en 12,73 pesos, tres centavos más que en la víspera. La brecha está en su piso en más de un año y medio en 42,5 por ciento. El contado con liquidación se operó en 11,82 pesos, dos centavos más. Las acciones líderes finalizaron con una suba promedio de 0,7 por ciento, con alzas destacadas para Aluar (3,4 por ciento), Macro (1,6) y Grupo Galicia (1,1). Los títulos públicos se negociaron con mayoría de bajas pero con diferencias mínimas, inferiores a medio punto porcentual. El riesgo país que mide el JP Morgan se mantuvo en 630 puntos básicos.