El titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, le advirtió ayer en una reunión privada al presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Luis Segura, que si los clubes no cancelan sus obligaciones con el fisco, el Estado podría embargar parte de los ingresos que generan los contratos con los sponsors y las transferencias de jugadores al exterior. Apeló a que las entidades ingresen a la moratoria impositiva que vence hoy. Además, Segura indicó que los árbitros Pablo Lunati, Diego Ceballos y Javier Uziga podrían ser suspendidos hasta que resuelvan sus irregularidades tributarias. Echegaray también advirtió sobre la existencia de paraísos fiscales del fútbol, utilizados para evadir tributos nacionales.

La reunión fue solicitada por la AFA, que en el último tiempo es acusada, como la FIFA, de tener prácticas irregulares o al menos no hacer lo suficiente como para que el negocio del fútbol no sea opaco. Un botón de muestra es el caso de Jonathan Bottinelli, ex defensor de San Lorenzo y River, procesado por la Justicia y afectado por un embargo sobre sus bienes por el delito de evasión. Otro ejemplo es el del árbitro Pablo Lunati, investigado por presunta evasión simple y agravada (ver aparte).

Además de Lunati, mantienen una situación fiscal irregular los jueces de fútbol Diego Ceballos y Javier Uziga. A la salida del encuentro, Segura dijo que “lo vamos a hablar con el Sadra y la AAA –entidades gremiales que nuclean a los árbitros–, veremos si árbitros o jueces de línea que mantienen una situación irregular con la AFIP quedan suspendidos. De todos modos, la cuestión fiscal la tiene que resolver cada uno”.

Segura asistió a la sede de la AFIP junto al presidente de Racing, Víctor Blanco, uno de los dirigentes que suena para disputar la conducción del organismo rector del fútbol nacional en las elecciones de octubre. Segura planteó que en la reunión sólo se conversó sobre los árbitros, pero la AFIP dio a conocer una agenda bastante más extensa, que involucra la espinosa cuestión de la deuda de los clubes.

Echegaray le recordó a Segura que hoy vence la moratoria fiscal de la Resolución General Nº 3756, régimen al que podrían atenerse los clubes de fútbol que mantienen deudas con el fisco. Si bien no se conoce al detalle la situación patrimonial de cada entidad (información que el propio Segura dijo ignorar), la deuda con el fisco sería de 3000 millones de pesos.

“En caso de no regularizar dicha deuda, nos veremos obligados a comunicar la existencia de la misma a los distintos sponsors y trabar embargos sobre los pagos que ellos efectúan, así como solicitar las medidas cautelares correspondientes sobre la percepción de los importes que puedan recibir ante eventuales transferencias de jugadores al exterior”, sentenció Echegaray. “El que no entre a la moratoria sonó”, traducen desde despachos oficiales. El plan permite cancelar deudas con el fisco en 120 cuotas con una tasa de interés del 1,9 por ciento.

Echegaray también dialogó con Segura sobre la reunión que mantuvo con Michel Platini, titular de la UEFA (entidad madre del fútbol europeo) sobre el Fair Play Financiero, mecanismo por el cual los clubes tienen que demostrar que no tienen deudas con otros clubes, jugadores o autoridades tributarias para participar en las competiciones. “Los clubes y la AFA deben revertir la situación en la que se encuentran y cumplir con el Fair Play Financiero Fiscal”, dijo el titular de la AFIP. “Necesitamos tiempo para implementarlo”, respondió Segura a la prensa.

Echegaray calificó de “práctica nociva” la existencia de los “paraísos fiscales deportivos”, que se utilizan para la realización de operaciones de triangulación en las transferencias de jugadores para evadir impuestos y lavar dinero. “En la mayoría de los casos los dirigentes de los clubes fueron partícipes de estas maniobras”, advirtió el funcionario.