El intercambio comercial durante el mes pasado arrojó un superávit de 439 millones, que implicó una mejora de 106 por ciento respecto al saldo de 213 millones de igual mes del año anterior, informó ayer el Indec. La mejora estuvo impulsada principalmente por un alza de 10 por ciento en las cantidades vendidas de productos primarios exportados, en especial de la soja y sus derivados. La cifra permitió revertir el déficit del primer cuatrimestre y el saldo acumulado es un superávit de 350 millones de dólares. El comercio exterior evidencia un estancamiento respecto a las cifras del año pasado, dado que las exportaciones apenas aumentaron un 2,7 por ciento y las importaciones cayeron un 1,8 por ciento. Las cifras del intercambio comercial también reflejan un proceso de primarización de las ventas externas. Según el informe del organismo que conduce Jorge Todesca, aumentaron 30 por ciento en cantidades las manufacturas de origen agropecuario, mientras que cayeron un 7 por ciento los productos industriales. Un informe de la consultora Abeceb.com destaca el crecimiento del16 por ciento en las cantidades importadas.

En mayo último las exportaciones alcanzaron un valor de 5343 millones de dólares, mientras que las importaciones ascendieron a 4904 millones, lo que resultó en un superávit de la balanza comercial de 439 millones. La mejora de la balanza comercial estuvo vinculada a precios, que incidieron de distinta manera entre exportaciones e importaciones. El aumento de las exportaciones se explicó por un alza de 10 por ciento en las cantidades que fue compensado levemente por la caída en los precios. Por el contrario, la baja en las importaciones se explica por una caída de 15,3 por ciento en los precios, “compensado en parte por la suba de las cantidades”, según el Indec. Las cantidades importadas crecieron en mayo 16 por ciento interanual.

Respecto a la composición de las ventas externas, durante mayo se observó un aumento del 30 por ciento en las cantidades de manufacturas de origen agropecuario y un incremento de 8,4 por ciento en productos primarios. Por su parte, las manufacturas de origen Industrial exhibieron una caída de 7 por ciento en cantidades y de 4,8 por ciento en precios. Las ventas de combustibles fueron afectadas por una baja de 21 por ciento en cantidades y de 30 por ciento en precios.

“La desagregación por uso económico arroja un dato llamativo: a diferencia de lo acontecido en el primer cuatrimestre del año donde las importaciones de vehículos eran el principal factor de impulso, en mayo se destaca la aceleración en el ingreso de bienes de consumo y de bienes de capital”, de acuerdo con el informe de Abeceb. En términos interanuales las compras externas de bienes de consumo crecieron en cantidades un 44 por ciento y las de capital un 18 por ciento. Los bienes intermedios crecieron un 17,5 por ciento en cantidad. “El comportamiento en particular de los bienes de consumo es relevante debido a que se da en un contexto en el cual la mayoría de las variables asociadas al consumo privado arrojan resultados negativos”, agrega.

Pese al estancamiento del comercio exterior, el superávit acumulado a mayo revierte el rojo de 769 millones de dólares del primer cuatrimestre del año pasado. De esta manera, entre enero y mayo, el intercambio comercial refleja una ganancia de 350 millones de dólares. En enero pasado el resultado había sido un déficit de 185 millones de dólares, en febrero hubo un superávit de 93 millones, en marzo volvió a registrarse un saldo negativo de 298 millones y abril evidenció un resultado positivo de 300 millones. En lo que va del año, las exportaciones suman un total de 22.471 millones de dólares, con una caída de 11 por ciento en los precios de los productos vendidos, que fue compensada por un incremento del 12 por ciento en las cantidades. Las importaciones en ese lapso sumaron 22.121 millones de dólares, un 4,6 por ciento menos que en igual período de 2015, con un retroceso de 13,7 por ciento en los precios y un avance del 10 por ciento en las cantidades.

En mayo los principales socios comerciales fueron Brasil, China y Estados Unidos. Los envíos al país vecino alcanzaron a 670 millones de dólares y las importaciones alcanzaron a 1164 millones. Las exportaciones a China sumaron 813 millones de dólares por productos primarios y manufacturas de origen agropecuario, mientras que se importaron 956 millones. A Estados Unidos se le vendieron 410 millones de dólares pero se le compraron 715 millones.