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Los empresarios del calzado continúan insatisfechos por el creciente ingreso de zapatos brasileños al mercado argentino. El titular de la Cámara del Calzado de Córdoba, Gerardo Juárez, pidió que se refuercen los mecanismos del Mercosur para frenar la importación “indiscriminada” desde Brasil. El vicegobernador cordobés, en tanto, dice haber hecho ya una propuesta para dar alivio al sector.
“Con subsidios y otras promociones, Brasil inunda el mercado argentino, perjudicando a la industria del calzado, que en Córdoba da empleo a unos 10.000 operarios”, se quejó Juárez el fin de semana pasado, en la Feria del Calzado de la Región Centro. Para este empresario, la situación se deriva del incumplimiento del Tratado de Asunción, que establece en 13 millones el límite para la entrada de zapatos desde Brasil, y por ello pidió el fortalecimiento de estas medidas contempladas en el acuerdo.
Según las cifras que maneja el sector, sólo en el primer semestre de este año el ingreso desde el país vecino ha crecido en un 78 por ciento respecto del mismo período de 2003 y se teme que supere lo permitido. El acelerado aumento llevó incluso al secretario de la Industria, Alberto Dumont, a enviar este mes una carta a su par brasileño, Mauricio Fortes, “para expresarle la preocupación” por este tema, pero sin contemplar ninguna medida.
Mientras tanto, el vicegobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, aseguró también el fin de semana, durante el mismo evento que Juárez, que su provincia ha propuesto ya la creación de una “reserva de mercado” del 75 por ciento para los productos locales por espacio de dos años.
La propuesta de los cordobeses contempla que, durante ese período, el Gobierno garantice a los productores nacionales el acceso a las materias primas a precios y calidad internacionales, alentando además créditos para la inversión y la modernización. Como contraparte, los empresarios se comprometerían a no aumentar los precios y a registrar a unos 20.000 trabajadores.