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La llegada de Antonio Brufau al cargo de presidente ejecutivo de Repsol– YPF –y con él, del grupo La Caixa al control de la petrolera– empieza a dejar ver sus consecuencias. Ayer se anunció en Madrid una importante reestructuración organizativa y el desplazamiento de algunos ocupantes de cargos clave que estaban muy vinculados con Alfonso Cortina, anterior titular de la compañía que dejó su cargo el último 27 de octubre. A partir de ahora, las operaciones de Repsol en la Argentina quedarán a cargo del español Enrique Locutura, cuya responsabilidad abarcará además los negocios de la empresa en Brasil y Bolivia.
La nueva estructura organizativa estará centrada en tres grandes áreas de negocios: Upstream (exploración y producción), Downstream (refinación, comercialización y química) y Latinoamérica. La primera, considerada como el “principal vector de crecimiento del grupo en el próximo plan estratégico”, estará a cargo de Nemesio Fernández Cuesta como director general. Con el mismo rango, Pedro Fernández Frial encabezará el área de Downstream.
Locutura, además de director general para Latinoamérica, asumirá la representación institucional del Grupo Repsol-YPF en la Argentina. En ese cargo reemplaza a Ramón Blanco, que hasta ahora se desempeñaba como consejero delegado y por lo tanto en el mayor cargo ejecutivo por debajo de Cortina. Este cargo, al que Blanco había accedido en julio de 2003 (en oportunidad de la anterior reestructuración), ahora desaparece como tal.
Blanco llegó al máximo cargo ejecutivo como persona de extrema confianza de Alfonso Cortina, a quien conoció después de desempeñarse en el Banco Zaragozano a las órdenes de su hermano, Alberto Cortina. Tuvo la mayor responsabilidad en la compra de YPF, en las postrimerías del gobierno menemista, y luego fue el responsable de las operaciones en la Argentina de la petrolera, ya con el cargo de vicepresidente corporativo. Ahora será propuesto como presidente ejecutivo de una subsidiaria de Repsol, CLH, que comercializa combustibles en España.
Enrique Locutura había sido nombrado consejero delegado de Gas Natural en representación de Repsol-YPF en junio de 2003, cargo que ocupaba hasta ahora. Participó activamente en la creación de esa compañía, que surgió de la fusión de Catalana de Gas y Gas Madrid. La Dirección General de Latinoamérica recién creada contará con cinco direcciones de negocios y será responsable de la exploración y producción, refinación, logística, comercialización y química en la Argentina, Brasil y Bolivia. Dentro del nuevo organigrama, el máximo órgano de conducción de la empresa estará constituido por el Comité de Dirección, presidido por Antonio Brufau y compuesto por los ocho directores generales y el director corporativo financiero, Luis Mañas. El cuerpo se reunirá alternativamente en España y la Argentina.