ECONOMíA › CONFLICTOS EN GASIFERAS
PODRIAN PROVOCAR CORTES EN EL SUMINISTRO
La presión en el caño viene de abajo
Los paros de trabajadores de TGN, Gas Natural BAN, Pampeana y del Sur podría generar problemas en el servicio. Las empresas no responden al reclamo, amenazando extender el conflicto.
Por Raúl Dellatorre
El estado de conflicto laboral por el que atravesaron distintos servicios públicos a lo largo del último año llegó ahora al complejo gasífero. Por ahora, en silencio, pero seguramente irá sumando decibeles en la medida en que el grado de conflictividad vaya haciéndose sentir en el servicio. La falta de respuesta de las empresas de transporte y distribución a las demandas salariales y al reclamo de renegociación de convenios generó el inicio de medidas de fuerza en Transportadora Gas del Norte, Gas Natural BAN y las dos distribuidoras operadas por Camuzzi, Gas Pampeana y Gas del Sur. Según fuentes gremiales, en los próximos días la paralización de tareas en puntos clave de la operación podrá empezar a ser percibida por los usuarios, que verán disminuido el suministro.
El personal de TGN extendió ayer el conflicto a todo el plantel que se desempeña en plantas compresoras, al cumplir el cuarto día hábil de paro por 24 horas. “Hoy le entregamos las plantas a la empresa, para que se hagan cargo de la operación”, informó ayer el secretario general de la Asociación del Personal de la Industria del Gas Natural, Rubén Ruiz. El personal de TGN viene de cumplir un mes de suspensión de las medidas de fuerza en cumplimiento de la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo. En el transcurso de ese período, las negociaciones resultaron nulas, ya que no medió ninguna propuesta empresaria en torno del reclamo de 33 por ciento de aumento en los sueldos y de abrir una discusión sobre las condiciones de trabajo.
Según fuentes empresarias, la medida de fuerza afectaría en lo inmediato a 11 de las 17 plantas compresoras que TGN posee en la red troncal que administra. La empresa había propuesto que los trabajadores, a pesar del paro, mantuvieran guardias que permitieran mantener el servicio, pero no hubo acuerdo. “Recibimos aprietes, pero la gente se la banca”, apuntó, gráficamente, uno de los delegados en conflicto.
Otro frente de lucha planteado por el gremio es Gas Natural BAN, en la que el personal ingresó en su tercera semana de medidas de fuerza, con paros escalonados que llegarán esta semana a tres días de cese de tareas, luego de cumplir paros por turno de dos horas en la primera semana y cuatro horas en la segunda.
Por último, en las dos distribuidoras dependientes de Camuzzi, el personal ingresó en la segunda semana de paros escalonados. Al igual que en las otras dos empresas del sector en conflicto, los trabajadores sólo cumplen las emergencias mínimas para atender las urgencias más graves, pero no se realizan tareas de atención al público ni de reparaciones. Vale señalar que la medida de fuerza no es acompañada por la totalidad del personal, por lo cual algunas sucursales mantienen la atención normal. No así en los edificios centrales.
Según explicó Ruiz, “los empresarios hasta ahora eludieron hacer alguna propuesta concreta, que nos hubiera permitido empezar a discutir el tema”. Como antes sucedió con las concesionarias telefónicas o con Metrovías, cuando la negativa de las empresas a negociar convirtió los conflictos en luchas prolongadas, se prevé que podría volver a ocurrir otro tanto en esta ocasión. “En pocos días más, el cese de tareas en las plantas compresoras puede impactar en el servicio; se va a notar la menor disponibilidad de gas”, anticipó Rubén Ruiz. El dirigente sindical, sin embargo, admite que el conflicto puede resultar prolongado. “Tenemos espalda para aguantarlo, no nos vamos a poner nerviosos”, aseguró.