La economía sigue creciendo a tasas chinas. Según los datos difundidos ayer por el Indec, el Estimador Mensual de Actividad Económica (Emae), una variable que se aproxima a la evolución del producto bruto, creció en febrero un 9,5 por ciento en relación con igual mes del año pasado. Así, el primer bimestre del año cerró con una expansión de nada menos que el 9,3 por ciento.

Con estos resultados, la actividad económica acumula 39 meses consecutivos de crecimiento (en forma interanual) y mantiene el ritmo de avance por encima del 9 por ciento que alcanzó el año pasado. Para tener una idea, según las cifras distribuidas por el FMI, durante 2005 la única economía en el mundo que creció más fue China, con un 9,5 por ciento.

La sostenida expansión de la economía local llevó también a revisar los pronósticos que hasta hace poco mantenía el propio FMI. Esta semana, el organismo elevó su proyección de crecimiento anual para Argentina de un módico 4,2 por ciento a un 7,3 por ciento. La magnitud de la revisión lleva a preguntarse en base a qué variables el Fondo pronosticaba inicialmente un crecimiento tan bajo, en especial después de que el 2005 cerrara con una expansión del 9 por ciento. Como sea, para la mayoría de las consultoras privadas, de continuar durante los próximos meses la tasa de crecimiento del primer bimestre, el año ya tendría garantizado un piso de actividad del 8 por ciento.

Para el Mercosur, el Fondo estima un crecimiento para este año del 4,2 por ciento, y para Brasil el pronóstico es de sólo 3,5 por ciento, aunque superior al 2,3 por ciento del año pasado. El caso de Brasil es interesante, porque es hoy el modelo económico a seguir para Washington: dólar bajo, altas tasas de interés, enorme superávit fiscal y baja inflación. Sin embargo, ese modelo, como se ve, también implica un muy moderado crecimiento.

Según los números del Emae de febrero, el ritmo de la recuperación económica no muestra ningún signo de desaceleración. En febrero, el Emae creció 1 por ciento en relación con enero, quebrando dos meses de estancamiento (diciembre 2005/noviembre y enero 2006/diciembre 2005). Además, fue el incremento más alto de los últimos cinco meses y el segundo de los últimos diez.

Durante el 2006, el crecimiento sigue apuntalado por la industria y la construcción. Durante febrero la actividad manufacturera subió 8,6 por ciento en relación con igual mes del año pasado, completando el primer bimestre con un avance de 6,2 por ciento. Los sectores de mayor impulso fueron el automotor y todo el complejo dedicado a la elaboración de materiales de la construcción. Por su parte, la industria de la construcción en su conjunto mejoró 18,4 por ciento en el segundo mes del año. El comercio internacional también realizó un aporte importante dado que las exportaciones subieron 15 por ciento. Y el consumo de servicios públicos se incrementó un 12,3 por ciento.