Algo más de un millar de productores agropecuarios, repartidos en unas catorce columnas, terminaron ayer a la tarde en Plaza de Mayo una marcha que habían comenzado el lunes en Jujuy. La movilización fue convocada por la Federación Agraria Argentina bajo la consigna principal de evitar la extranjerización de la tierra y no considerar a todo el campo bajo la misma visión de prosperidad “que algunos quieren vender”.

El principal orador de este acto fue Eduardo Buzzi, titular de la FAA, a quien precedió en la oratoria Ulises Forte, otra de las figuras del gremio ruralista que ayer intentó alertar a la opinión pública acerca del riesgo de que pequeños productores terminen fundidos, a menos que haya algún viraje en la estrategia oficial para el sector. “Hay entre 600 y 700 pueblos que si no se cumple con una política agropecuaria van a terminar transformándose en fantasmas y terminaremos con el Obelisco lleno de gente y el interior vacío”, sentenció.

La marcha comenzó el lunes en la jujeña San Pedro y transitó Salta, Santiago del Estero, varias localidades de Córdoba, Santa Fe (incluyendo Rosario, con un acto frente al monumento de la bandera) y Buenos Aires, hasta llegar a la Capital Federal, donde tuvo dos puntos de concentración importantes, el Congreso y la Plaza de Mayo. “Marchamos porque creemos que hay que discutir un modelo que incluya a pequeños y medianos productores y permita frenar el avance de los grupos económicos más concentrados”, señaló Buzzi en su discurso.