Con comportamientos diversos, las distintas cadenas de hipermercados y entidades de comerciantes empezaron a hacer públicas sus ofertas de canastas navideñas, a precios rebajados, en línea con el compromiso asumido el viernes pasado en la Casa de Gobierno ante las autoridades actuales y futuras del Ejecutivo. Las entidades de consumidores mantuvieron, sin embargo, sus críticas al supuesto acuerdo, por no haber establecido expresamente el detalle de precios por productos que se comprometen a respetar los comerciantes. En tanto, diversos informes provenientes de centros urbanos del interior del país indican que la tendencia a la suba en los precios de los productos tradicionales para las fiestas los ubican en un piso de aumento del 30 por ciento respecto del año pasado. Y no descartan que se produzcan nuevos ajustes antes de Navidad, pese a que los comercios ya están abastecidos.

Distintas expresiones del comercio minorista coinciden en las expectativas de un fuerte impulso al alza en la demanda de productos navideños, como correlato del aumento del consumo registrado a lo largo del año. En tal sentido, no esperan que un aumento significativo en los precios haga mella en las ventas. “De hecho, la cerveza de litro que a principios del verano anterior se vendía a un peso, hoy tiene un valor de 2,50 a 3 pesos y se vende cada vez más”, señaló un representante de una de las cadenas de almaceneros del interior del país. Observación que, por otra parte, es fácilmente verificable en cualquier zona o rama comercial.

La propia presidenta electa, Cristina Kirchner, fue la encargada el viernes pasado de anunciar el compromiso de los comerciantes de ofrecer una canasta “accesible” para las fiestas. Ayer, la respuesta de los comerciantes se vio reflejada en la publicidad de dos cadenas de híper, Coto y Carrefour, de oferta de artículos o canastas reducidas a precios similares a los fijados para las fiestas de un año atrás. La canasta navideña de Coto (siete artículos) se ofrece a 11,99 pesos, compuesta por una sidra, un turrón de maní, un budín fantasía, un pan dulce, una garrapiñada, un budín de frutas y un maní con chocolate. La cadena francesa puso en oferta ocho productos tradicionales y de consumo masivo, que se podrán adquirir por separado y a los mismos valores (según asegura) que un año atrás: pan dulce de medio kilo, budín clásico, turrón de maní, garrapiñadas, pollo fresco, asado de novillo, mayonesa y vino espumante. La Federación de Almaceneros, Autoservicios y Polirrubros pondrá a disposición del público dos alternativas: una canasta navideña con 20 productos a un valor de 45 pesos, y una más reducida a 12 pesos. Los autoservicios de residentes chinos, a su vez, ofrecerán también dos canastas alternativas, a 49,28 y a 18 pesos, respectivamente. En todos los casos, las canastas están compuestas por productos de segundas marcas y de las confituras tradicionales.

En el interior, hay muchas expectativas sobre la forma en que se reflejarán estos compromisos en las ofertas que se pongan a disposición del público. Varios relevamientos, tantos de autoridades provinciales como de organizaciones de consumidores, señalan aumentos superiores, incluso, a los que se verifican en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En Tucumán, la Federación de ONG asegura que las alzas en los productos tradicionales alcanzan al 60 por ciento; en Entre Ríos, la Dirección de Seguimiento de Precios provincial estimó en 29,5 por ciento el aumento del precio de una canasta navideña tipo con respecto al año pasado. En Santa Fe, en la ciudad de Rafaela por ejemplo, se detectaban aumentos superiores al 30 por ciento en pan dulce y sidras, pero menores en vino, champagne y confituras. Los distintos sondeos coincidían, sin embargo, en que se espera una fuerte suba en el consumo, aun cuando las rebajas no sean suficientemente atractivas.