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El ministro de Agricultura, Julián Domínguez, no sólo atiende a la Mesa de Enlace. El funcionario recibió a mediados de semana a los representantes del Foro Nacional de Agricultura Familiar (Fonaf) en la sede del INTA, donde se comprometió a “reconstruir un modelo de desarrollo que integre a los productores de pequeña escala”. En ese camino, Domínguez abogó para que los agricultores familiares formen parte del consejo de asesores del INTA, el INTI y el Senasa. “Es un paso político relevante”, reconocieron a Página/12 desde el Fonaf. Según datos de Agricultura, el 80 por ciento de los alimentos que llegan a la mesa de los argentinos proviene de agricultores familiares, que suman más del 75 por ciento de la producción entre vides, algodón, caña de azúcar, horticultura y otros productos.

“Los agricultores familiares formamos parte de un proyecto político nacional, por eso nos pareció relevante el encuentro con el ministro”, señaló a este diario Guillermo Saucedo, integrante del Fonaf, institución que nuclea a 700 organizaciones de todo el país. Del encuentro participaron también la secretaria de Agricultura Familiar y De-sarrollo Rural, Carla Campos Bilbao, y los subsecretarios Guillermo Martini y Luciano Di Tella.

El objetivo del ministerio apunta a crear una “institucionalidad” para la agricultura familiar, donde haya representaciones de este sector en todo el país. “Primero está la mesa de los argentinos y la accesibilidad de todos a sus alimentos. Esas son banderas innegociables para nosotros. Queremos la Argentina de la diversificación”, afirmó Domínguez durante el asado que compartió con los integrantes del Fonaf. “La Mesa de Enlace no maneja el alimento de los argentinos”, fue el mensaje que les dejó Domínguez a los pequeños productores.

“Los agricultores familiares no son otra entidad más sino que representan un modelo de desarrollo diferente”, indicó Rigoberto Lagos, un productor del Alto Valle, provincia de Río Negro. En este sentido, los pequeños productores reivindicaron la necesidad de impulsar políticas que garanticen la “soberanía alimentaria”.

Los integrantes del Fonaf acordaron con los funcionarios un nuevo encuentro para el mes que viene, donde el objetivo será plantear algunas herramientas concretas sobre el uso y tenencia de la tierra, la protección de las reservas de agua, la soberanía alimentaria y un esquema de comercialización diferente de los planteados por los grandes jugadores del sector. “No queremos meter nuestros productos en una góndola de supermercado sino que pretendemos una lógica propia de comercialización, como por ejemplo el armado de mercados populares”, afirmó Saucedo. Según datos oficiales, los agricultores familiares aportan el 25 por ciento del PBI agropecuario.