ECONOMíA
La calma vale caro
Al Banco Central le costó ayer 26,4 millones de dólares de sus reservas mantener estable la cotización cambiaria. Con dicha cifra debió compensar la baja en las liquidaciones de los exportadores –por debajo de los 50 millones en la jornada– y una movida demanda de importadores y bancos, que en conjunto absorbieron casi 75 millón de dólares. Para la demanda minorista, en tanto, la autoridad monetaria debió destinar 1,4 millones. En ese marco de operaciones, pudo mantener sin variantes los valores de compra y venta a los que negocia en la plaza minorista, en 3,42 y 3,50 pesos, respectivamente. En casas de cambio, el dólar cerró a un valor promedio para la compra de 3,51 pesos y 3,57 para la venta, tan sólo un centavo por encima del valor del día anterior. No es poco mérito, en medio de las tensiones provocadas por la renuncia presentada, todavía sin resolución, de parte del titular del Banco Central por desavenencias con el ministro de Economía. En opinión de los cambistas, el nerviosismo inicial se fue diluyendo a medida que el Central pudo demostrar tener manejo de la situación.