La cantidad de usuarios residenciales que de forma voluntaria renunciaron al subsidio del Estado Nacional en el servicio de luz, agua o gas ascendía ayer a más de doce mil. El beneficio en el servicio de agua fue eliminado en 7277 casos. Para el subsidio al servicio de gas se dieron de baja 9192 hogares, mientras que 10.258 usuarios renunciaron a la ayuda estatal en el servicio de electricidad. En el caso del agua, se trata sólo del servicio que presta AySA, que se limita a la Ciudad de Buenos Aires y 17 municipios del conurbano bonaerense, a diferencia de la electricidad y el gas, que tienen carácter nacional en el área de generación, a cargo de Cammesa y Enargas respectivamente. En total, los doce mil usuarios que hasta ahora renunciaron apenas alcanzan un 1 por ciento del total en todo el país. Fuentes del Ministerio de Planificación, que encabeza Julio De Vido, indicaron que en las próximas semanas se pondrá en marcha un registro online donde figurará la situación de cada hogar en relación con el monto de la tarifa que le corresponde por cada uno de los servicios básicos, el total subsidiado y cuánto paga el propio usuario.