EL MUNDO › EE.UU. SIGUE PRESIONANDO, AHORA CON LOS INSPECTORES
Lanzando los perritos a Irak
Estados Unidos dijo ayer que Saddam tiene vínculos con Al-Qaida y que no hay nada que negociar sobre su ataque contra Irak.
En la saga del ataque norteamericano a Irak en el marco de su guerra contra el terrorismo, todos los personajes están de acuerdo en un punto: el regreso de los inspectores de armas de la ONU. Después empiezan las discrepancias. La consejera para la Seguridad nacional de la Casa Blanca, Condoleezza Rice, aseguró ayer que “Irak mantiene claramente vínculos con Al-Qaida”, y el gobierno británico presentará próximamente las pruebas. Pero algunos expertos del gobierno de Bush padre aseguran que no es así, mientras otros especialistas en inspecciones de armas dicen que en realidad Irak ni siquiera tiene la capacidad mortífera que se le atribuye. El secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, declaró que “Irak no tiene tiempo para negociar”, pero su aliado en Italia, el premier Silvio Berlusconi, aseguró que no habrá preparativos de guerra por lo menos hasta febrero.
Ahora que el ataque no parece inminente, y que incluso Estados Unidos está trasladando sus instalaciones bélicas a Qatar, Arabia Saudita flexibilizó su posición acerca del posible uso de su base militar, construida para la guerra del Golfo, para atacar a Irak. “Si Naciones Unidas acepta una decisión tomada por el Consejo de Seguridad para implementar una política de la ONU, todo país que haya firmado la carta de la ONU tiene que cumplirla”, dijo el canciller saudita, príncipe Saud Al Faisal, cuando le preguntaron por el uso norteamericano de la base Príncipe Bin Sultán, a la cual se oponían los sauditas hasta hace poco. El canciller libanés, Mahmud Hammud, lanzó un llamamiento similar en nombre de la Liga Arabe. Pero Egipto, un país clave del mundo árabe, dijo ayer que en ningún caso aceptaría un ataque a Irak.
Mientras tanto, Estados Unidos insiste en poner a Irak en el centro de todos los males. Ayer, en una entrevista para la cadena Fox, Rice dijo que “miembros de Al-Qaida fueron vistos en Bagdad”, aunque se cuidó de vincularlo con el 11 de setiembre. Según el Sunday Telegraph británico, el gobierno de Tony Blair difundirá el 24 de setiembre un informe que incluye informaciones del entrenamiento de dos dirigentes de Al-Qaida, Abú Zubair y Rafid Fata, en campos terroristas en Irak. El informe también dirá que Saddam reconstruyó tres fábricas de armas químicas y biológicas y detallará el programa nuclear iraquí, en particular las actividades secretas de una fábrica de producción de uranio en Al Qaim, 256 km al oeste de Bagdad. En este sentido, el semanario norteamericano Newsweek en su edición de ayer afirma que Estados Unidos entregó a Irak en los años ‘80, cuando Saddam estaba en guerra con Irán, materiales y recursos para fabricar armas biológicas.
Sin embargo, la ONU no tiene pruebas de que Irak disponga de armas prohibidas, de acuerdo con el sueco Hans Blix, jefe de la Comisión de la de Vigilancia, Verificación e Inspección de la ONU. “Si hay agencias de inteligencia que mantienen que los iraquíes están construyendo armas de destrucción masiva, entonces deben tener evidencias de las que nosotros no estamos informados”, aseguró Blix, en una entrevista que publicó ayer el diario chileno El Mercurio. Y respecto de los vínculos de Saddam con Al- Qaida, el ex consejero para la Seguridad Nacional de Bush padre, Brent Scowcroft, dijo que “Saddam se encuentra en lista de Bin Laden de personas a ejecutar, porque es un dirigente secular, no es un dirigente islámico”.
Estados Unidos continuó ayer con su serie de ultimátum. “Es demasiado tarde para querer negociar. Irak no tiene tiempo”, declaró Powell. “No estamos hablando en términos de guerra ahora, pero Saddam sabe lo que tiene que hacer. Si los inspectores de armas de la ONU regresan a Irak, deben poder ir cuándo quieran a dónde quieran. No vamos a negociar nada”, afirmó, en referencia a las palabras del vicepremier iraquí, Tarek Aziz, quien dijo que su país sólo permitiría el retorno de los inspectores bajo un acuerdo amplio que evitaría un ataque estadounidense y levantaría las sanciones impuestas hace 12 años. Según Berlusconi, que se entrevistó con Bush recientemente, en cualquier caso la operación militar no se produciría antes de comienzos del año próximo.