El jefe máximo de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Rodrigo Londoño Echeverry, alias Timochenko, manifestó ayer su confianza en que se superarán los “escollos” de última hora y que el diálogo con el gobierno de Colombia se abrirá en la fecha prevista. El pactado inicio de las conversaciones se pospuso al menos hasta hoy por problemas logísticos y climáticos. En tanto, Noruega mantiene la rueda de prensa convocada para mañana.

Entre las dificultades que argumentaron los voceros del gobierno del presidente colombiano, Juan Manuel Santos, se encuentran el retraso de sus delegados y las faltas de algunos salvoconductos que necesitan los representantes de la guerrilla para participar. No obstante, Noruega sostiene que mañana se realizará una conferencia de prensa en donde se darían a conocer al menos partes de las negociaciones y, probablemente, la fecha en que los diálogos se mudarán a La Habana. “Seguimos planeando una conferencia de prensa el 17 de octubre”, se limitó a señalar el vocero del Ministerio del Exterior noruego, Svein Atle Michelsen.

El gobierno colombiano y las FARC acordaron en agosto comenzar las negociaciones en las dos primeras semanas de octubre, pero ya habían retrasado su llegada, mientras trabajaban para afinar los detalles de las reuniones, en las que se buscará terminar con el conflicto armado de medio siglo. Una nueva traba se sumó a último momento porque los insurgentes pretenden incluir a la holandesa Tanja Nijmeijer en su equipo, una decisión que el Ejecutivo de Santos rechaza con el argumento de que no es ciudadana colombiana, pero que la guerrilla defiende porque los términos de su acuerdo les permiten elegir libremente a su delegación. La emisora pública Canal Capital, de Bogotá, señaló que Nijmeijer está aún en Cuba y que parte del retraso de las negociaciones se debe a que ella y otros dirigentes están esperando salvoconductos para no ser detenidos por Interpol, que cuenta con órdenes de captura en su contra.

Como precisa el diario español El País, Ricardo Téllez, conocido como Rodrigo Granda, es otro de los negociadores en esta situación, dado que la Justicia española tiene emitida una orden de detención internacional a través de Interpol por el caso de la supuesta colaboración entre la guerrilla colombiana y la agrupación armada separatista vasca ETA. Granda, según el diario español, es buscado también por la Justicia paraguaya por el secuestro y la muerte de Cecilia Cubas, hija del ex presidente paraguayo Raúl Cubas, en el 2004.

El enviado a Oslo de la radio colombiana Caracol, en tanto, informó que los negociadores del gobierno “estarían llegando” a la capital noruega hoy por la tarde y subrayó que el hermetismo ha sido total en torno del desplazamiento de los delegados gubernamentales.

Por su parte, Timochenko habló ayer por la emisora bogotana La FM y atribuyó la demora a cuestiones de seguridad. “Quien tenga una orden de captura vigente está corriendo riesgos donde quiera que esté, por tanto resulta elemental la necesidad de suspenderlas para hacer posible nuestra presencia en la mesa. ¿Y de qué carácter? Cabría explicar a quienes se comprometieron con nosotros en la mesa”, advirtió. También recordó que la organización guerrillera le presentó al gobierno una lista. “Se les explicó dónde estaban ubicados cada uno; cinco grupos para cinco sitios distintos. Por cuestiones de seguridad no se trasladan hasta tanto no sea confirmada la fecha”, afirmó. Sobre este tema, prefirió no especular y por el contrario confió en que el gobierno tiene controlada la situación, de manera que los dos grupos negociadores estarán en la capital noruega en la fecha prevista.

Sin embargo, el máximo líder de los rebeldes no especificó cuándo los negociadores de la guerrilla llegarán a La Habana. Asimismo, Timochenko defendió la inclusión de la holandesa Nijmeijer en la mesa de diálogo porque tiene una tarea concreta a realizar en el desarrollo de las conversaciones y juzgó “determinante” la participación de Simón Trinidad. El líder insurgente se declaró optimista de cara al proceso y defendió la idea de “abrir un camino para conquistar la paz con justicia social”. “Dentro de las FARC todos los guerrilleros, desde el más nuevo al más antiguo, acompañamos con entusiasmo este nuevo intento”, remarcó.

La delegación del gobierno colombiano estará presidida por el ex vicepresidente Humberto de la Calle e integrada por el alto comisionado para la Paz, Sergio Jaramillo, los generales retirados Oscar Naranjo y Jorge Mora, y el empresario Luis Carlos Villegas. En tanto, la representación de las FARC estará encabezada por el número dos de la organización, Luciano Marín, alias Iván Márquez, y formada también por Luis Albán alias Marco León Calarcá, Rodrigo Granda y Jesús Carvajalino alias Andrés París. Por la guerrilla participarán también Miguel Pascuas, Sargento Pascuas, el más veterano de sus guerrilleros y único sobreviviente de quienes en 1964 fundaron la organización, y Ricardo Palmera, conocido también como Simón Trinidad, autorizado a intervenir mediante videoconferencias porque está preso en Estados Unidos, donde fue condenado a sesenta años de prisión.