Desde Santiago

El gobierno de Sebastián Piñera designó ayer al tercer hombre fuerte de Carabineros, Carlos Carrasco, como el responsable total de las acciones que se comenzarán a aplicar en la zona de conflicto en la Araucanía, donde se ha generado una serie de atentados los últimos días y que la madrugada del sábado costó la vida al matrimonio de agricultores Luchsinger-Mackay, luego que encapuchados quemaran su casa ubicada en un predio en la localidad de Vilcún. El ministro del Interior, Andrés Chadwick, precisó que bajo la responsabilidad del uniformado “quedará todo el tema de la acción y la violencia terrorista, tanto en la VIII, IX y en Región de los Ríos”.

Agregó que se hará “uso de todos los instrumentos legales que el gobierno considere útiles, oportunos, y de acuerdo con las circunstancias para poder utilizarlos. Pensamos que hoy lo más útil que nos resulta como instrumento jurídico es precisamente la invocación de la ley antiterrorista”.

La muerte de los ancianos y una seguidilla de ataques en la zona encendieron literalmente el alerta en La Moneda pues, a casi tres años de gobierno, el tema del reclamo de tierras por los pueblos originarios no ha sido resuelto y la violencia no para. En ese escenario, ayer Piñera convocó a una reunión ampliada en el palacio de gobierno a sus principales ministros del comité político para analizar la situación que se produce en la Araucanía. Un día antes, Piñera viajó a la zona, donde anunció siete medidas para combatir la violencia.

En este escenario y ante la presión de distintos sectores de la zona en conflicto, como parlamentarios y dirigentes gremiales, que piden que se decrete un estado de excepción constitucional, Chadwick aseguró que ésta es una medida que si bien no se considera necesaria por el momento, “se está evaluando”.

Al mediodía del sábado, el secretario de Estado expresó las condolencias del gobierno a los familiares de la pareja, cuyos funerales se realizaron ese día. En la oportunidad, endureció su discurso. “Enfrentamos a un enemigo fuerte, poderoso, organizado en la zona”, dijo. Así las cosas, además de aplicar la ley antiterrorista, se recalificarán querellas interpuestas la semana pasada; se nombró un fiscal especial; se aumentó la dotación policial (400 en total); se creó una zona de control diurna y nocturna; se formó un equipo jurídico especial y se mandató a la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI) a coordinar información con Inteligencia de las Fuerzas Armadas.

Para hoy se espera una cita entre la gente de la ANI y el gobierno “para aprovechar todas las oportunidades y productos de Inteligencia que están disponibles en el país”, dijo Chadwick.

Desde la otra vereda, el werkén de la Comunidad Autónoma de Temucuicui, Jorge Huenchullán, condenó los hechos de violencia surgidos en la región de la Araucanía, principalmente el ataque incendiario que cobró la vida de los Luchsinger-MacKay.

Hasta ahora, Celestino Cerafín Córdova Tránsito, de 26 años, es la única persona detenida por su presunta participación en el ataque incendiario.

Fuentes de la investigación indicaron a la prensa chilena que el comunero fue capturado a unos 1500 metros del lugar del incendio, cuando huía con una herida a bala en el tórax (supuestamente perpetrada por Wagner Luchsinger) en compañía de otro sujeto, el cual escapó tras enfrentarse a tiros con la policía.

Para hoy, la Sociedad Nacional de Agricultura convocó a un duelo nacional en honor al matrimonio fallecido, mientras que las asociaciones de camioneros llamaron a un paro nacional en la jornada. Entre los años 2005 y 2013, un total de 81 camiones ha sido destruido en el sur del país. El denominador común en estos hechos es que ocurren de noche, actúan sujetos encapuchados, amenazan al chofer y prenden fuego a los vehículos de transporte mayor.

A la fecha, el daño patrimonial asciende al menos a los 3800 millones de pesos, dijo al sitio web emol.com José Villagrán, dirigente de la Confederación Nacional de Transporte de Carga de Chile (CNTC).