Barack Obama asumió su segundo mandato en la Casa Blanca, en una ceremonia íntima que llevó adelante el presidente de la Corte Suprema de Justicia, John Roberts. En compañía de su mujer, Michelle, y sus hijas Sasha y Malia, Obama inició el nuevo período de gestión al prestar juramento en el Salón Azul de la casa de gobierno, sobre una Biblia perteneciente a la familia de la primera dama. La investidura presidencial oficial fue organizada en privado ante la presencia de los medios que siguen al mandatario, siguiendo lo dictado por la Constitución que exige que el acto sea realizado un 20 de enero. La ceremonia pública tendrá lugar hoy a las 11.30 de la mañana (13.30 de Argentina) en las escalinatas externas del Capitolio, con la presencia de miembros del gabinete, de políticos republicanos y demócratas, así como de invitados especiales.

“Yo, Barack Hussein Obama, juro solemnemente que cumpliré fielmente las funciones de presidente de Estados Unidos, y que haré todo en mi poder para preservar, proteger y defender la Constitución de Estados Unidos”, dijo Obama a las 11.55 hora local ante el juez Roberts. Durante la ceremonia, que duró menos de un minuto en el Salón Azul de la residencia presidencial, ante sólo un puñado de personas, entre ellas la familia de Obama y algunos periodistas, Obama tomó juramento con su mano izquierda sobre la Biblia de la familia de su esposa Michelle, quien sostenía el libro. Tras la ceremonia, Obama, demócrata de 51 años, abrazó a su esposa y a sus dos hijas, Malia, de 14 años, y Sasha, de 11, antes de decir “lo hice”.

Temprano en la mañana, el vicepresidente Joe Biden asumió su cargo por otros cuatro años más al tomar juramento desde el Observatorio Naval, su residencia oficial, en un acto presidido por la primera jueza latina de la Corte Suprema de Justicia, Sonia Sotomayor. Horas después, tanto Biden como el líder de la Casa Blanca se dirigieron a la Tumba del Soldado Desconocido en el Cementerio de Arlington, donde descansan los restos de los combatientes caídos en distintas guerras. Tras la visita, Obama y su familia acudieron a la Iglesia Episcopal Metodista Africana en Washington, una de las iglesias más históricas del país, donde conmemoraron al reverendo y líder de los derechos civiles, Martin Luther King Jr. En el último evento del día, Obama junto a Michelle, el vicepresidente y su esposa, participaron a las 20 (22 de Argentina) de una ceremonia de encendido de velas y recepción en el National Building Museum.

Hoy, con un clima de temperaturas que esta vez se esperan no serán tan bajas como las de 2009, el presidente número 44 de los Estados Unidos llegará a las escalinatas externas del Capitolio a las 11.30 de la mañana para la tradicional jura de mandato. Allí, bajo el lema “Nuestro pueblo. Nuestro futuro”, el primer presidente afroamericano de la historia del país dará cuenta de los planes que tiene en su nueva administración en materia de control de armas –tras la masacre en la escuela de Newtown—, la reforma migratoria, los temas presupuestarios y el cambio climático. Obama inicia su segunda gestión sin la coyuntura económica de 2009 que afectó al país y con un índice de aprobación superior al 50 por ciento, de acuerdo con la encuesta de Pew Research difundida este fin de semana.

De cara al exterior, el presidente probablemente mencione a Irán, cuyo programa de enriquecimiento de uranio desvela a Estados Unidos, así como la situación en Siria, Mali y Argelia.

Luego, Obama será recibido por miembros del Congreso en el Hall de las Estatuas para compartir una comida en el Capitolio, para después dirigirse al famoso desfile que todo mandatario realiza por la Avenida Pensilvania, que une el congreso con la Casa Blanca. Allí lo esperarán desde muy temprano filas de ciudadanos que serán testigos del desfile, que en sus dos horas de duración contará con la esperada caminata de la pareja presidencial, con carrozas representando a distintos estados del país, bandas, bailarines, caballos y unidades militares, entre otras presentaciones.

El día culminará en el Centro de Convenciones de Washington con el típico baile del comandante en jefe que brinda cada presidente junto a la primera dama desde que fuera inaugurado por el ex mandatario republicano George W. Bush. En otro salón del mismo complejo los esperarán, momentos más tarde, miles de norteamericanos que buscarán también compartir los festejos y el baile inaugural con Obama y Michelle.

Mientras tanto, en el fin de semana largo por el feriado de Martin Luther King Jr., la ciudad continúa siendo testigo de reuniones, fiestas y galas que son llevadas adelante desde el sábado y hasta hoy incluso en bares, restaurantes, salones de hoteles y otros lugares de Washington.

Muchos de estos eventos, así como los oficiales, contarán con la presencia de cantantes reconocidos como Beyoncè, Stevie Wonder, Katy Perry o el músico Moby, y de actores de Hollywood convocantes como Queen Latifah, Eva Longoria o Kirsten Dunst.