Las acusaciones contra las tropas malienses se multiplican en otra jornada de intervención militar francesa contra grupos islamistas que controlan el norte del país. La Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) acusó a los soldados del ejército de Mali de perpetrar ejecuciones en el oeste y el centro del país y pidió la creación inmediata de una comisión de investigación independiente. Al menos once personas fueron ejecutadas en Sevare, 650 kilómetros al noreste de Bamako, en el campamento militar del ejército maliense, detalló la ONG que investiga esos casos. “Obtuvimos testimonios concordantes de fuentes locales y tenemos las identidades de once víctimas”, afirmó Florent Geel, responsable de Africa de la FIDH. Ayer, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, saludó la intervención en Mali, pero reiteró su temor sobre el impacto de la operación en los civiles.