Dos concejales y un policía de Paraguay fueron acusados de escoltar un cargamento de cocaína incautado el fin de semana en una estancia del departamento de Amambay, al norte de Asunción, en medio de sospechas de complicidad gubernamental con el narcotráfico, informó ayer el titular de la División Antinarcóticos, Bartolomé Báez. Por otra parte, el gobierno paraguayo relacionó a un concejal detenido el fin de semana con una tonelada de marihuana, con la estructura criminal de Vilmar Acosta, alcalde que está prófugo desde octubre y a quien se señala como sospechoso del asesinato del periodista Pablo Medina y de su asistente, Antonia Almada. El presidente de Paraguay, Horacio Cartes, se mostró dispuesto a cortarles las manos a los funcionarios de su gobierno, en caso de que incurran en hechos de corrupción.

Cartes, del Partido Colorado, asumió su actual cargo el 15 de agosto del 2013, y ayer, durante un acto público, expresó su satisfacción porque, según afirmó, hasta el momento durante su administración no se conoció aún ningún acto de corrupción. Ese delito fue una constante durante las más de seis décadas de gobierno del Partido Colorado, entre 1947 y 2008, especialmente durante la dictadura de Alfredo Stroessner, que se desarrolló desde 1954 a 1989. Aun después de la caída del genocida paraguayo, los gobiernos colorados siguieron siendo salpicados por graves denuncias de corrupción.

Los dos funcionarios acusados de escoltar un cargamento de cocaína incautado en Amambay son los concejales departamentales César Augusto Quevedo Isnardi, del opositor Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), y José María Luis Bogado Martínez, del gobernante Partido Colorado. Según informó Báez, los dos políticos iban acompañados por guardaespaldas y un policía, estaban armados, y se resistieron al procedimiento de identificación y registro del vehículo. No fueron detenidos de inmediato porque en el auto en el que viajaban no se encontró nada, aunque una inspección en los alrededores permitió descubrir 252 kilos de cocaína.

La droga habría sido dejada por una avioneta a la que las autoridades le seguían la pista en base a denuncias recibidas, según Báez.

El senador Miguel López Perito, ex secretario de la Presidencia de Fernando Lugo, denunció ayer complicidad de autoridades policiales, judiciales, gubernamentales y del Poder Legislativo con el narcotráfico. “No creo que pueda mencionar nombres, pero hay complicidad institucional. Solamente de esta manera se puede entender que habiendo una disposición del 19 de noviembre aún no se haya librado la orden de bloqueo para disponibilidad de los bienes de Vilmar Neneco Acosta”, declaró el legislador.

Sobre Vilmar Acosta, el alcalde prófugo, el secretario nacional Antidroga de Paraguay, Luis Rojas, declaró a la radio Primero de Marzo: “Es un patroncito, parte de un importante engranaje”. El detenido es Patricio Estigarribia, de 43 años, del PLRA, concejal de Villa Ygatimí, en Canindeyú. En ese departamento, que linda con la frontera con Brasil, fueron asesinados el 16 de octubre Medina, corresponsal regional del diario ABC Color, y Almada, por cuyas muertes está imputado Acosta, que era intendente por el Partido Colorado hasta que se fugó. Acosta también está imputado por producción, acopio y tráfico de marihuana. Las muertes de Medina y Almada sacaron a la luz el debate sobre la posible existencia de un sistema de narcopolítica en Paraguay.