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Un día después del atentado contra el consulado británico en Turquía, la embajada británica en Irán fue atacada con una bomba incendiaria. Pero a diferencia del atentado en Estambul, en la sede diplomática en Teherán no hubo víctimas ni daños importantes. Según diplomáticos británicos, la bomba fue lanzada por un hombre que estaba en un auto. El explosivo golpeó el portón y causó un pequeño incendio en la entrada de la embajada. Este año, la embajada británica en Teherán fue blanco de varios ataques, incluyendo cuatro disparos contra su edificio en agosto pasado.