EL MUNDO › EL GOBIERNO RUSO INVESTIGA LA EXTRAÑA CAIDA DE DOS AVIONES
El fantasma de un posible atentado
Dos aviones rusos que sumaban más de 100 personas a bordo se estrellaron en el centro y sur de Rusia. No se sabían las causas ni se descartaba una acción terrorista. Un avión explotó antes de caer.
Al menos 100 personas murieron ayer al estrellarse casi en forma simultánea dos aviones de pasajeros en el sur y el centro de Rusia. Ambos aviones partieron del mismo aeropuerto en Moscú. Un avión de línea con 42 personas a bordo se estrelló en el centro de Rusia, mientras que el segundo aparato con más de 50 ocupantes desapareció cuatro minutos después en el sur del país, según anunció a primera hora de hoy el Ministerio de Situaciones de Emergencia ruso –después se dijo que colapsó–. El presidente Putin fue informado de los hechos y ordenó reforzar las medidas de seguridad. No se descarta un atentado terrorista, ya que testigos han relatado haber visto una explosión. No se reportaron sobrevivientes.
El primer avión desapareció del radar alrededor de las 16 horas de Argentina (22.56 hora de Moscú), mientras que el segundo desapareció del radar a las 22.59 (hora local), después de haber despegado del mismo aeropuerto en ruta a Sochi. El primer aparato, un Tupolev-134 con 34 pasajeros y ocho miembros de tripulación a bordo, desapareció de la pantalla del radar cuando se dirigía hacia Volgogrado, en el sur de Rusia, indicó Marina Ryklina, la portavoz del Ministerio de Emergencias. La cola del avión fue hallada más tarde cerca del pueblo de Buchalki, en la región de Tula, a unos 180 kilómetros al sur de Moscú, precisó. Los equipos de salvataje presentes en el lugar buscaban las partes restantes del aparato y las cajas negras. No se brindó ninguna precisión sobre la suerte de los pasajeros y la tripulación. Responsables del Ministerio de Situaciones de Emergencia dieron a conocer declaraciones de testigos que hablaban de una explosión antes de que el avión se estrellase, señaló por otra parte la agencia Interfax.
Funcionarios rusos también anunciaron la desaparición casi simultánea de un segundo aparato, un Tupolev-154 de la compañía Sibir con más de 50 personas a bordo, cerca de la ciudad de Rostov, cuando se dirigía hacia la ciudad balnearia de Sochi, en el Mar Negro. Horas después se supo que esta aeronave también se estrelló. El Departamento de Situaciones de Emergencia regional de Rostov reportó que se descubrió un incendio cerca del pueblo Zelenovka a las 3 de la mañana, hora de Moscú. Un equipo de rescate fue en busca del avión faltante. Ambos aparatos habían despegado de Domodédovo, uno de los cuatro aeropuertos de la capital rusa y desaparecieron de la pantalla del radar con pocos minutos de intervalo entre uno y otro, según una fuente del centro de control aéreo de la capital rusa, citado por Itar-Tass. La posibilidad de acciones terroristas no puede descartarse, agregó la agencia.
El presidente ruso, Vladimir Putin encargó a los servicios secretos FSB, “comenzar sin demoras a investigar” los episodios y extremar las medidas de seguridad en los aeropuertos de Rusia, ante la posibilidad de que se tratara de atentados terroristas, informó el servicio de prensa del Kremlin citado por la agencia Interfax. El mandatario se trasladó a la localidad de Sochi, donde tiene una residencia de descanso.
Ambos aviones de pasajeros eran utilizados para trayectos de media distancia y de uso estándar tanto en Rusia como en Irán y en la ex Europa del Este, según el portal de Internet Airliners.net. Expertos en aviación señalaron que Rusia tiene una pobre historia en seguridad aeronáutica. Este avión de tres motores se comenzó a utilizar comercialmente en 1972. En los últimos cinco años, un total de 764 personas murieron en accidentes de avión en Rusia y 220 aparatos fueron destruidos, según un informe publicado en abril pasado por el Senado ruso. La mayoría de esos accidentes (60 por ciento) están directamente vinculados a lagunas de la legislación rusa en el área de la seguridad de la aviación, según el mismo informe. También ayer hubo una explosión en la parada de colectivos en Moscú, resultó de una bomba equivalente a 100 o a 200 gramos de TNT, según una fuente policial; cuatro personas fueron heridas, dos de las cuales están en terapia intensiva.
En Washington, las autoridades estadounidenses expresaron su preocupación por los accidentes. Un vocero del Departamento de Estado dijo: “Obviamenteestamos preocupados por la noticia. Estamos siguiendo de cerca los eventos y tratando de determinar los hechos”. Por su parte, un portavoz del Departamento de Seguridad nacional señaló que, aunque la situación se sigue de cerca, hasta el momento no se ha analizado la posibilidad de aplicar medidas de seguridad adicionales en Estados Unidos.