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Por Clodovaldo Hernández *
Desde Caracas

Los partidarios del gobierno de Hugo Chávez ven a Telesur (Televisora del Sur) –el nuevo canal latinoamericano propiedad estatal de Venezuela, Cuba, Uruguay y Argentina que el pasado martes emitió su señal– como la red de noticias que va a liberar a los pueblos del yugo de cadenas como CNN. Telesur empezará sus emisiones el 24 de julio, aniversario del nacimiento de Simón Bolívar. Los adversarios de Chávez aseguran que es otro proyecto del presidente venezolano para extender su revolución y consolidarse como líder regional.
“Vamos a comenzar a desalambrar los campos de la comunicación social”, dice el periodista uruguayo-venezolano Aram Aharonian, responsable del lanzamiento de Telesur. No por coincidencia ha recurrido a ese estribillo de la canción del cantante chileno Víctor Jara (asesinado en el golpe de Estado del general Augusto Pinochet) contra los latifundios, pues el punto de partida de Telesur es que los grandes intereses trasnacionales, principalmente de EE.UU., se han apropiado del poder mediático. “Es un proyecto estratégico por contrahegemónico, en eso no estamos tratando de engañar a nadie. Seremos una herramienta para la integración de los pueblos latinoamericanos y para expresar su diversidad”, dice. Con el mismo énfasis, Aharonian afirma que no es una plataforma de lanzamiento ni para la revolución venezolana ni para Chávez. “El día que sea así, todos los que estamos trabajando acá nos vamos corriendo”, asegura.
El nacimiento de Telesur consistió en una carta de ajuste y un microprograma demostrativo que se emitieron en el canal 806 del New Skies Satellite (NSS). Telesur es propiedad estatal de los cuatro países, pero pocos dudan en atribuirle la paternidad a Chávez. La distribución de las acciones también revela que Venezuela tiene un papel protagónico, con un 51 por ciento del capital inicial (2,5 millones de dólares). Argentina posee el 20 por ciento, Cuba, el 19 por ciento y Uruguay, el 10 por ciento.
Los organizadores estiman que será necesaria una inyección de unos 10 millones de dólares más para pagar equipos, estudios y cubrir el primer año de actividades. Los estudios centrales se construyen en Caracas. De entrada, el área de cobertura será Sudamérica, Centroamérica, el Caribe, Norteamérica, Europa occidental y el norte de Africa.
En la rueda de prensa de anuncio del inicio de transmisiones –y tal vez como una forma de demostrar que se trata de algo verdaderamente distinto– se le dio la oportunidad de preguntar a un representante de medios alternativos venezolanos, quien preguntó si Telesur sería la Al Yazira de Latinoamérica. El ministro de Comunicación e Información, Andrés Izarra, respondió que se esforzarán en competir con las cadenas transnacionales, pero aclaró que no será un canal exclusivamente de información: ésta ocupará un 40 por ciento del tiempo. Aharonian precisó que habrá tres informativos diarios de una hora, así como entre 10 y 12 avances, y crónicas, reportajes de investigación y entrevistas. Las informaciones no se referirán exclusivamente a los cuatro países socios. “También informaremos sobre EE.UU. porque son América”, ironiza Aharonian.
El siguiente desafío serán las dificultades técnicas para que la señal llegue al público. “Hay países donde la televisión por cable se ha masificado y otros donde su penetración es mínima. Tenemos que buscar la mejor fórmula para cada lugar’, dice Aharonian.

* De El País de Madrid. Especial para Página/12.