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La luna de miel ha terminado. La central sindical única de Uruguay (PIT-CNT) dispuso para el próximo jueves 30 el primer paro de actividades de los trabajadores sindicalizados de Montevideo, en la primera medida sindical contra el gobierno del iz-quierdista Tabaré Vázquez. Además, ayer partió una marcha de 140 kilómetros, de Punta del Este a Montevideo, en defensa de la estatización del servicio de agua potable y saneamiento, dispuesto en la reforma constitucional aprobada en octubre pasado.
Vázquez concurrió ayer a la sede del PIT-CNT acompañado por cuatro de sus ministros (Trabajo, Industria, Vivienda y Transporte), en un gesto que el dirigente sindical Fernando Pereira calificó de “muy positivo para la democracia”. Los sindicalistas aclararon que la medida de fuerza del jueves próximo “no es contra el gobierno, sino que busca promover, entre otros puntos, la participación de los trabajadores en los Consejos de Salarios”, donde se discuten aumentos salariales, que regirán desde el 1º de julio, informó el diario El Espectador. La movilización de la semana próxima del PIT-CNT es en reclamo de una “urgente ley de libertades sindicales”, un salario mínimo nacional equivalente a 120 dólares y la materialización de la “negociación colectiva para todos”. Las demandas serán respaldadas con una detención de actividades por cuatro horas, a media mañana, cuando se inicie una concentración en una plaza céntrica y se cumpla una posterior marcha a la Cámara de Comercio, en la City montevideana.
Decenas de personas participaron en la marcha del agua, organizada por la Comisión Nacional en Defensa del Agua y de la Vida (Cndav). Ayer partió de Punta del Este con rumbo a Montevideo, adonde llegará el lunes para manifestar contra el gobierno que, afirman, no ha cumplido con la reforma. Con las elecciones de octubre pasado, además de elegir presidente y Parlamento, los electores uruguayos aprobaron en un referéndum por un 64 por ciento la reforma constitucional para estatizar el servicio de agua potable y saneamiento. La marcha pasará por varias ciudades, donde se espera que se sumen más manifestantes. La propuesta había sido una de las promesas de campaña de Vázquez, pero al llegar al gobierno mantuvo las concesiones a las empresas privadas que cumplen los servicios de agua y saneamiento en Maldonado y Canelones, hasta el fin de los contratos, salvo a la española Aguas de Bilbao (Uragua), a la que se le rescindió el contrato por presuntos incumplimientos en obras y en pagos del canon.