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Los funcionarios de Estados Unidos estaban jubilosos ayer con recientes arrestos que parecen incluir a significativos miembros de Al-Qaida. El más importante es “el Oso”, de quien se dice que es un alto funcionario de reclutamiento. Se trata de Abu Zubair al-Haili, una notable figura de 127 kilos, ahora en custodia en Marruecos, donde fue arrestado junto a otros seis sospechosos después de que las autoridades frustraran un complot para usar un bote lleno de explosivos para atacar los buques de guerra de Estados Unidos y de Gran Bretaña en el estrecho de Gibraltar. Se cree que los otros son tres hombres sauditas y sus esposas marroquíes.
Funcionarios marroquíes dicen en los hogares de estos hombres fueron encontrados manuales para hacer bombas y armas, y que existía evidencia de que se les había ordenado dejar el país. Se dice que Al-Haili, un saudita, es uno de los 25 principales líderes de Al-Qaida, y que jugó un rol vital en llevar a combatientes potenciales a campos de entrenamiento a Afganistán antes del 11 de septiembre. Se dice que es un asociado muy próximo a Abu Zubaydah, el alto operativo ahora en custodia de Estados Unidos cuya información –dicen los norteamericanos– les advirtió sobre recientes potenciales ataques. Otra figura aparentemente importante, Mahammed Haydar Zammar, que también fue arrestado en Marruecos, ahora está detenido en Siria. Aunque EE.UU. considere a Siria como “patrocinador del terrorismo”, Damasco está ansiosa para que la vean cooperando.