Martes, 8 de enero de 2008 | Hoy
EL MUNDO › SEGUN WASHINGTON, TEHERAN FUE HOSTIL CON SUS NAVES
Naves ligeras iraníes hostigaron a buques de guerra estadounidenses en el estratégico estrecho de Ormuz este fin de semana, incrementando las tensiones entre Washington y Teherán. La Casa Blanca reclamó con urgencia a Irán que no realice acciones provocadoras que puedan llevar a situaciones peligrosas, pero Teherán rechazó la acusación de haberlo provocado. El episodio reforzó el clima de hostilidad que caracteriza las relaciones entre Washington y Teherán, uno de cuyos ejes es el supuesto desarrollo de armas nucleares en Irán, que el gobierno del presidente George W. Bush intenta impedir.
Cinco naves de la guardia costera iraní se acercaron a 200 metros de tres embarcaciones estadounidenses –un crucero, un destructor y una fragata– que navegaban por aguas internacionales del estrecho de Ormuz, vía obligada para el petróleo del Golfo, y los amenazaron por radio con hacerlos explotar, dijo un responsable del Pentágono que mantuvo el anonimato. Según ese relato, las embarcaciones iraníes “se comportaron de manera muy agresiva, amenazaban a las naves y arrojaban cajas al mar precisamente delante de las tres naves, forzándolas a realizar maniobras de alejamiento. Nadie fue herido, pero hubiera podido suceder”. “Y justo cuando las naves de Estados Unidos se preparaban a abrir fuego, las embarcaciones iraníes se alejaron”, agregaron las fuentes del Pentágono. El portavoz del Departamento de Estado, John McCormack, definió como “desconsiderado, despreciativo y potencialmente hostil” el episodio. Además, McCormack advirtió que Estados Unidos “está listo a enfrentar” a Irán si este país produce actos hostiles contra Washington o sus aliados. “Se trató de la más grave provocación de este tipo que jamás hayamos visto”, dijo una fuente del Pentágono que pidió permanecer en el anonimato.
Sin embargo, el gobierno iraní minimizó el caso y sostuvo que lo sucedido en Ormuz fue un hecho “normal” que se resolvió con la recíproca identificación de las embarcaciones. “Es algo normal, que de tanto en tanto sucede y el problema se resuelve con la identificación de las dos partes”, dijo el portavoz del Ministerio del Exterior iraní, Mohammad Ali Hosseini. A su vez, un vocero de la Guardia Revolucionaria iraní dijo que “la marina de la Guardia Revolucionaria no atacó ni provocó a naves de la marina estadounidense en el estrecho de Ormuz”.
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