EL MUNDO
¿Qué es mejor para Argentina y la región?
- Mario Rapoport, economista, especialista en asuntos regionales: “Primero hay que plantearse qué diferencias implicaría para América del Sur, y no solamente para la Argentina por el contexto político de la región. Se podrían plantear diferencias a nivel global. Tal vez con Kerry se traten de suavizar las políticas hacia Medio Oriente y el resto del mundo. Uno de los aspectos más positivos de la victoria de Kerry sería que se acepte más a los organismos políticos internacionales y otros países en el orden mundial, no como ocurrió con la invasión a Irak. La victoria de Bush sólo implicaría más de lo mismo. Acentuaría los niveles de conflictividad y de su política, negativos para la opinión pública mundial. También acentuaría sus rasgos belicistas basados en el temor al terrorismo. Es probable que un triunfo de Kerry implique una mayor aproximación a América latina, y tal vez una aceleración en la creación de la zona de librecomercio. Se dice que Kerry es más proteccionista pero el aumento a los subsidios agrícolas lo creó Bush”.
- Roy Cortina, diputado de la Ciudad de Buenos Aires por el Partido Socialista: “Los principales analistas coinciden en que, en general, la política de Estados Unidos no cambiará porque sus intereses no cambiarán. Lo que puede variar es la atmósfera interna y también política en el mundo. Como ha sido, por ejemplo, el cambio de atmósfera que hubo en Argentina con Kirchner, donde se puede observar un cambio en cuanto a políticas de derechos humanos pero no ha habido cambios estructurales. La victoria de Kerry puede implicar una tendencia a disminuir el unilateralismo. A Bush se lo toma como un fundamentalista religioso y nacionalista. Y cada vez se avanza aún más a una democracia restringida interna que permita garantizar su hegemonía en el mundo. En cuanto a la política hacia América latina, no cambiaría mucho aunque gane Kerry. Puede igualmente ser favorable que gane Kerry, justo cuando empiezan a asomar propuestas políticas de centroizquierda en la región, preferidos más por los gobierno demócratas que por los republicanos. Los demócratas tienden a una mayor política de diálogo. Con respecto a la negociación de la deuda dependerá más de la posición que adopte el gobierno argentino”.
- Federico Schuster, decano de la Facultad de Ciencias Sociales: “Hay cosas que van a cambiar y cosas que no van a cambiar, porque hay ciertas relaciones imperialistas que se van a mantener. Lo que puede cambiar es el modo. El estilo Bush es decididamente agresivo. Con un triunfo de Bush es posible esperar un agravamiento de las actitudes militares. En cuanto a Kerry, es una figura que no es lo suficientemente conocido, aunque los demócratas conciben una política más dialoguista. Esto permitiría un poco más de oxígeno a proyectos de desarrollo en otros países. Pero también la política que adopten dependerá de su interés en los recursos externos para paliar el déficit interno y que puede llevar a que necesiten del resto del continente. Tal vez el nuevo lineamiento que se puede observar en América latina sea vivido por Bush como potencial amenaza, quizás más que Kerry. Con respecto a la deuda no se plantean cambios.