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No pasó ni una hora del comienzo oficial del proceso de desconexión, que ya se habían registrado disturbios tanto en la Franja de Gaza como en Cisjordania. En la primera zona ocupada, los incidentes tuvieron lugar en el mayor asentamiento de los 21 que la componen, la colonia de Neve Dekalim. Cientos de personas –colonos e infiltrados– bloquearon la entrada del asentamiento ante los rumores de que las tropas israelíes intentarían ingresar a la colonia. Mientras, en el norte de Cisjordania, unos 200 colonos chocaron contra las Fuerzas de Defensa Israelíes (FDI) cuando intentaban aislar los asentamientos que serán evacuados a partir de hoy.
En Gush Katif, un grupo de colonos estalló en cólera momentos después de que la zona fuera oficialmente cerrada, rompiendo los vidrios de al menos cuatro automóviles e incendiando neumáticos para evitar la entrada de tropas a la colonia Neve Dekalim. La organización de colonos Yesha intentó calmar a la multitud pero no tuvo éxito. Los enfrentamientos en Cisjordania fueron rápidamente repudiados por el número dos de los asentamientos de Judea-Sumaria, Shaul Goldstein, que denunció la violencia de los manifestantes afirmando: “Esto torpedea nuestra lucha”. Sin embargo, esto no evitó que los colonos tiraran abajo el bloqueo que habían impuesto las FDI en la ruta que va de Shavei Shomron a dos de los cuatro asentamientos que serán evacuados en la zona, Sa-Nur y Homesh. Un oficial israelí de la fuerza aérea fue herido y hospitalizado y el ejército debió dejar un camión blindado bloqueando la ruta. Otro incidente que según autoridades palestinas “torpedea” su lucha fue el secuestro anoche de un periodista francés que trabajaba para la cadena de televisión France 3, cerca de un hotel en la ciudad de Gaza, por militantes palestinos.
A pesar de estos estallidos de furia de los residentes, la resistencia más fuerte se espera de las más de cuatro mil personas que en las últimas semanas lograron infiltrarse en los asentamientos que serán desconectados para ayudar a los colonos a combatir la evacuación forzada a partir del miércoles. La mayoría de estos infiltrados pertenece al Movimiento Naranja –o Consejo Yesha como realmente se llama–, que ha adoptado el liderazgo de la resistencia a la desconexión. La coalición formada específicamente con el objetivo de impedir la evacuación de los colonos de Gaza tomó su color del Movimiento ucraniano que con su “revolución naranja” logró derribar el régimen de Leonid Kuchma a fines del año pasado.
En lo que sería el primer enfrentamiento armado desde que la Franja de Gaza fue cerrada, y que fuera declarada oficialmente el comienzo del Plan de Desconexión, el ejército israelí disparó anoche contra posiciones de las milicias palestinas desde el asentamiento de Kafar Darom, en respuesta al ataque con un mortero desde afuera, por milicias palestinas. Los colonos de Kafar Darom han escrito en las puertas de sus casas carteles en los que advierten: “Soldado/Oficial, stop. En el momento que llames a esta puerta te convertirás en parte directa del peor crimen en generaciones contra la nación de Israel”. “No seremos expulsados de nuestras casas. Nunca seremos sacados de aquí”, aseguran los carteles. Una colona del mismo asentamiento aseguraba: “Todavía no es muy tarde. Señor primer ministro, puede detener el tren suicida en el último minuto antes que destruya la nación judía”. Sin embargo, Ariel Sharon no parece tener intención de cambiar sus planes ya que anoche una columna de vehículos militares israelíes se dirigía a Gaza para comenzar la evacuación.