Un sargento de la infantería de marina de Estados Unidos fue sentenciado a 15 años de cárcel ayer por el asesinato de un civil iraquí en 2006. Una corte marcial en California falló que el sargento Lawrence Hutchins mató sin premeditación a Hashem Ibrahim Awad, un padre de familia de 52 años, que fue asesinado a sangre fría el 26 de abril de 2006 en Hamdania, al norte de Bagdad. La fiscalía afirmó que Hutchins, quien en la línea de mando era quien estaba a cargo de los siete militares implicados en este caso, habría optado por atacar a Awad después de haber fracasado en la captura de un jefe local de la rebelión iraquí. Con este veredicto, ya son ocho los soldados norteamericanos condenados por crímenes de guerra por la Justicia militar estadounidense. En el mismo caso, cuatro marines y un enfermero naval se declararon culpables de los cargos relacionados con el caso de la muerte de Awad, y pidieron beneficiarse de un proceso acelerado. Gracias a ello y a identificar a Hutchins como el autor intelectual del asesinato, fueron condenados a entre uno y ocho años de cárcel a finales de 2006 y principios de 2007. El miércoles pasado otro marine, el cabo Marshall Magincalda, había sido declarado culpable de robo, asociación para delinquir y conspiración para cometer los siguientes hechos: muerte, secuestro, robo, obstrucción a la Justicia, perjurio y conspiración. No obstante, fue absuelto de los cargos más serios, de asesinato y secuestro.